Foro de las Familias critica la medida del Ejecutivo, que no ha tenido en cuenta la situación de las familias numerosas o de las comunidades de vecinos y excluye de los paseos a los menores de 14 años.
El 2 de mayo, habrá una nueva fase de desconfinamiento. Ayer el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, señaló que los adultos podrán salir a pasear y a hacer ejercicio. Lo harán acompañados de la persona con la que convivan, con su familia, dijo Sánchez. Esto ocurrirá si las salidas de menores de 14 años no provocan un aumento de contagios.
Hoy comienza con los niños esa «transición a una nueva normalidad» de la que tanto habla el Ejecutivo. Los pequeños, que llevan 42 días confinados, podrán salir de casa para pasear. Después de una semana dando bandazos en torno a cuál sería la edad límite para salir a la calle, la norma sobre los menores, publicada ayer en el Boletín Oficial del Estado, solo establece que pueden hacerlo los que tienen entre 0 y 13 años. Quienes han cumplido los 14 quedan excluidos.
«Es una medida necesaria, pero da la sensación de que se ha improvisado sobre la marcha y de que los que han redactado la norma no tienen niños o nos los conocen mucho», dicen a ABC desde el Foro de la Familia. Desde esta entidad, sostienen que una de las «zonas grises» de la orden es que no haya excepciones para las familias numerosas: «Las que tengan tres hijos pequeños, tendrán problemas para controlar a los niños si solo va un adulto y puede haber más riesgo que si salen los dos padres». Para Blanca, que tiene cinco hijos de 11, 9, 7, 4 y 1 año y un marido en cuarentena, va a ser muy complicado, ya que no quiere dejar a los menores solos. «¿Cómo quiere el señor Sánchez que salga con los niños?», se pregunta. Asimismo, los centros de menores tutelados piden poder salir con más de tres niños. Si no, tendrán que hacer turnos y pasar muchas horas en la calle, rompiendo la dinámica del hogar.
«Va a ser una batalla»
César Pérez, padre de cuatro hijos de 9, 7 y dos mellizos de 5 años no cree que por fin haya llegado del día de poder salir a la calle. César, que tiene algunos problemas de movilidad, saldrá sentado en su «motillo» acompañado de las dos hijas mayores «porque se supone que van a ser más responsables respecto a las normas que ha puesto el Gobierno para salir». La madre paseará con los mellizos. «Son dos bichos inquietos –confiesa su padre–. Antes ya se rebozaban por el suelo, tocaban cada cosa que se encontraban por la calle... Si siempre les regañábamos por hacerlo, ahora va a ser una batalla».
En la orden, Sanidad limita los paseos a las zonas de uso público, pero veta los columpios, los espacios recreativos infantiles al aire libre o las instalaciones deportivas. Impone una distancia interpersonal con terceros de al menos dos metros y recuerda que deben cumplirse las medidas de prevención de higiene. No especifica si es necesario llevar mascarilla infantil, una medida de protección que no es obligatoria pero sí recomendada por las autoridades sanitarias. Hoy por hoy es casi imposible encontrar estas máscaras faciales para menores en las farmacias, totalmente desabastecidas.
Otra de las «zonas grises» es el uso de los espacios comunes en las comunidades de vecinos. En la orden, Sanidad no detalla qué está permitido y qué no en estas áreas, por lo que en algunas urbanizaciones deciden ser cautos y mantenerlas cerradas. Decidirá cada comunidad. La norma sí recoge que los niños deben salir de casa acompañados de una persona mayor de edad que conviva en el mismo domicilio que los niños y señala que también se puede hacer cargo de ellos un empleado de hogar o cuidador siempre que cuente con una autorización firmada.
Miedo al contagio
Sin las medidas de protección adecuadas muchas familias tienen miedo y ven esta salida «demasiado prematura», critica el Foro de la Familia. Es el caso de Cristina y su marido, que viven con cuatro hijos de 14, 13, 5 y 1 año en Parla (Madrid). Prefieren «esperar por miedo a un posible contagio». «No vale la pena arriesgarnos. El primer día saldrán muchos niños y, si mis hijos se encuentran a algún amigo, saldrán corriendo a abrazarlo. Será algo instintivo e inevitable por mucho que les hemos explicado que no pueden acercarse a nadie», apunta Cristina.
No hay comentarios:
Publicar un comentario