«Hay personas para las que el sistema de pensiones no será suficiente»
El presidente de la Asociación Española de Asesores y Planificadores Financieros defiende la «no demonización en política de los productos alternativos» .
Desde que el pasado mes de junio asumiera la presidencia de la Asociación Española de Asesores y Planificadores Financieros (EFPA), Santiago Satrústegui trabaja para transmitir a los inversores la importancia del asesoramiento financiero de calidad, esencial para enfrentarse a un mundo, el de la inversión, que, como él mismo define, es «tan incierto». Hoy, la asociación cuenta ya con algo más de 32.000 miembros certificados y el objetivo para 2021 es superar los 38.000.
A pesar de la nula rentabilidad que ofrecen hoy los depósitos, los hogares españoles han aumentado el dinero que tienen en estos instrumentos. ¿Cómo se explica?
Hay una sensación de que la economía se está desacelerando en global, en Europa, y en España también nos afecta. Todo lo que sea incertidumbre hace que los ahorradores e inversores tiendan a gastar menos y a tomar menos riesgos. Que suban los depósitos quiere decir que se consume menos, pero también que se invierte menos en activos con un poco más de riesgo.
¿Cómo puede un inversor de perfil conservador obtener rentabilidades en un entorno de tipos de interés cero y negativos?
Lo que tiene que entender un inversor es que para poder tener algo de rentabilidad, ya necesita asumir un poco de riesgo, por eso nosotros defendemos el asesoramiento financiero. Lo adecuado para asumir ese riesgo es hablar con alguien que conozca el mercado, que se esfuerce en conocer tus circunstancias y que te diga cuánto riesgo puedes y debes asumir.
¿Es mejor entonces optar por la renta variable?
No podemos asesorar a un inversor tipo, pero yo creo que la diferencia de lo que estamos viendo ahora respecto a hace 30 años es que hace tres décadas la rentabilidad de las letras del Tesoro sin riesgo estaba en un 14,5% y ahora mismo están en negativo. La renta fija, que ha sido un magnífico activo para construir carteras, ahora mismo tampoco sirve para aportar rentabilidad y para poder llegar a tener rentabilidades en renta fija también hay que asumir bastante riesgo.
¿Qué efectos tendrá la política monetaria del Banco Central Europeo si no se acompaña de medidas fiscales?
Hay que respetar el trabajo de los banqueros centrales, ya que manejan muchísima más información que ningún otro agente, pero parece muy claro que la política fiscal tiene que seguir a la política monetaria. Yo creo que eso lo está viendo todo el mundo y lo que hace falta es voluntad política para hacerlo, probablemente es una de las cosas que todos estamos esperando que pase.
La inversión en ladrillo tradicionalmente ha sido una de las más frecuentes en España. ¿La tendencia se mantiene o ha perdido peso en los últimos años?
Quizá ahora estaría considerándose algo más, pero en ese sentido parte de la cultura financiera es entender que el ladrillo sube y baja. De hecho, la crisis del 2008 en el mundo se produjo porque el precio del inmobiliario cayó mucho, lo que pasa es que normalmente el ser humano tiene la memoria corta. España estructuralmente tiene un peso alto en inmuebles porque generan una sensación de seguridad probablemente más allá de la que debe ser y, en cambio, esa falta de cultura financiera también hace que le demos a la inversión financiera más riesgo probablemente del que luego tenga. Ese es uno de los grandes temas estructurales del ahorro en España.
El Banco de España ha alertado sobre las carencias de la viabilidad del sistema público de pensiones. ¿El ahorro para la jubilación es una preocupación creciente entre los españoles?
Debería serlo. Sin hacer ningún alarmismo sobre las pensiones porque yo creo que el sistema de pensiones siempre tendrá que contribuir de alguna manera, hay muchas personas que tienen que pensar que para ellas el sistema de pensiones no va a ser suficiente. No tiene sentido estar un poco ciegos y pensar que el Estado nos va a solucionar todo y que nada depende de nosotros, ese paternalismo no es bueno. La promoción y la no demonización en política de los productos alternativos al sistema de pensiones es muy importante.
Ahora que vamos a nuevas elecciones, ¿qué mensaje daría al Gobierno que se formase?
Sería fantástico que ningún político tuviera que pedir perdón por tener un plan de pensiones, eso sería empezar a creer que hemos entendido el problema.
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