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miércoles, 19 de noviembre de 2014

ME TEMO QUE RAJOY QUIERE APAGAR EL INCENDIO CATALÁN CON GASOLINA

Apoyo casi unánime a Torres-Dulce para presentar la querella contra Mas

El fiscal general precisará los delitos de los que acusará también a Ortega y Rigau.

El fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, ha logrado el apoyo casi unánime de la junta de fiscales para presentar la querella contra el presidente de la Generalitat, Artur Mas, por la celebración del 9-N, según han indicado fuentes de la Fiscalía General del Estado. Torres-Dulce había tomado ya la decisión de acusar a Mas por no acatar la resolución del Tribunal Constitucional, que suspendió la celebración del proceso de participación. Sin embargo, ha tenido que recabar la opinión de la junta de fiscales a la que la Fiscalía Superior de Cataluña había apelado después de considerar que la acusación no tenía suficiente base jurídica.
En una nota, la Fiscalía ha calificado el apoyo de "muy mayoritario" a favor de la ratificación de formular querella por el 9-N. "En consecuencia, el ministerio fiscal emprenderá las acciones legales oportunas ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña", señala la nota. No será hasta que se presente la denuncia cuando se diriman las cuestiones técnicas sobre las que se ha debatido durante la reunión de este miércoles y los delitos de los que, finalmente, se acusará a Mas.
El fiscal general ha logrado el apoyo de 22 miembros de la junta de fiscales para acusar al presidente de la Generalitat. En contra de la propuesta de Torres-Dulce solo se ha mostrado, abiertamente, el fiscal de Seguridad Vial, Bartolomé Varga, que ha defendido la actuación de los fiscales pero no a través de una querella sino en los procedimientos que ya están abiertos en los juzgados. Uno de los más críticos ha sido el fiscal del Tribunal Supremo Pedro Crespo.

Eduardo Torres-Dulce ha trasladado a los miembros de la junta un informe en el que defendía que la celebración del 9-N supuso la comisión de cuatro delitos: desobediencia, prevaricación, usurpación de funciones y malversación y que sus responsables son, además de Mas, la vicepresidenta, Joana Ortega y la consejera de Educación, Irene Rigau. El aval de la cúpula de representantes del ministerio fiscal era fundamental para Torres-Dulce que, en cualquier caso, ha encontrado reticencias técnicas para argumentar algunos de los delitos, con lo que ha quedado en manos del propio Torres-Dulce el determinar cómo se concretarán las acusaciones.

El primero en dar a conocer su apoyo al fiscal general del Estado, a la salida de la reunión, ha sido el exfiscal de la Audiencia Nacional, Eduardo Fungairiño.
La junta de fiscales de sala, presidida por Torres-Dulce, ha concluido tras más de cuatro horas de debate sobre la presentación de la querella contra Mas, por la celebración del 9-N. A la cita han asistido un total de 25 fiscales. Entre los ausentes, el fiscal de Sala del Tribunal Supremo Juan Ignacio Campos y el fiscal militar que, tras la jubilación de su antecesor, aún no ha tomado posesión.
La decisión que adopte la Junta de Fiscales de Sala es, en todo caso, no vinculante, y la decisión última dependerá de Torres-Dulce, que trata con esta reunión de obtener el respaldo de la cúpula del Ministerio Público en una actuación que ha merecido el rechazo de los fiscales del territorio afectado.
La Junta la integran, además de Torres-Dulce, el teniente fiscal del Tribunal Supremo --el recientemente designado Luis Navajas-- y los fiscales de Sala.
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha afirmado que su Ejecutivo ha cumplido con su función, y ha añadido que ahora es la Fiscalía la que tiene que tomar las decisiones tras la jornada del 9 de noviembre, por lo que se ha comprometido a respetar lo que decida el Ministerio Público, "sea una cosa o la otra".
Antes de abandonar el hemiciclo, tras asistir a la sesión de control del Congreso, Rajoy ha recalcado que el Gobierno ha cumplido con su función y "los fiscales son los que tienen que tomar las decisiones" que tienen atribuidas con la legislación vigente. "Yo lo único que puedo hacer y lo que voy a hacer es respetar las decisiones que adopte la Fiscalía. Creo que ésa es la obligación del Gobierno y es lo que hace un país en el que cada uno ejerce las funciones que tiene que llevar a cabo", ha enfatizado.
Por su parte, el portavoz de la Generalitat, Francesc Homs, ha asegurado que el Ejecutivo catalán tiene todo "listo" para defenderse de una eventual querella de la Fiscalía que, si se materializa, supondría, a su juicio, un "ridículo internacional extraordinario" del Estado.
COMENTARIO:
NO SE PUEDE APAGAR EL FUEGO CON GASOLINA Y EL TEMA SE VA ENROCAR Y DARLE  ARGUMENTOS A LOS INDEPENDENTISTAS , DIÁLOGO O RECURRIR A LA FUERZA QUE NO ARREGLARÁ NADA.

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