«Estoy feliz porque hoy no ha venido nadie a pegarme»: el drama oculto de las monjas mayores de Belorado
La Guardia Civil constata la grave desatención de las religiosas rescatadas de Orduña: sin desayunar con el pañal sucio y conviviendo en las habitaciones con perros, orines y una gata que acababa de parir
Hospitalizadas tres de las cinco monjas mayores de Belorado tras el rescate de la Guardia Civil
Sin desayunar, con mugre debajo de las uñas, el pelo sin lavar desde hacía días, con el pañal sucio después de toda la noche y alojadas en unas habitaciones en las que también se encontraron dos perros entre orines y una gata que acababa de parir. Según ha podido conocer ABC, la intervención en el monasterio de Orduña (Vizcaya) el pasado 18 de diciembre –ordenada por el Juzgado de Instrucción nº 5 de Bilbao para ejecutar el traslado de las cinco hermanas mayores de la comunidad de Belorado– permitió constatar un estado de grave desatención higiénica y sanitaria en las religiosas, todas ellas de entre 87 y 101 años. La situación llevó a que tres de ellas quedaran ingresadas en el hospital de Basurto (Bilbao) tras la revisión médica.
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