Economía pone fecha a la reforma laboral: acuerdo en noviembre, aprobada en diciembre y en vigor en enero
Calviño menciona cuatro aspectos a negociar: temporalidad, subcontratas, convenios colectivos y nuevos ERTEs
El Ministerio de Economía confía en tener aprobada la nueva reforma laboral en noviembre para su aprobación por decreto en diciembre y entrada en vigor en enero, tal y como ha trasladado a la prensa en la Cumbre del G-20 que se celebra este sábado y mañana en Roma.
«Estamos ahora enfilando la fase decisiva de esa reforma laboral. Hemos acordado cuál va a ser el procedimiento que vamos a seguir para la coordinación de la posición del Gobierno y hemos reafirmado el fuerte compromiso de este Gobierno con el diálogo social como el proceso para poder lograr la mejor reforma posible», defendió la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, en rueda de prensa en el Palacio de Congresos en Roma.
Cuatro puntos para negociar
Para la vicepresidenta cuatro son los aspectos fundamentales de la reforma laboral a negociar y por tanto donde puede haber discrepancias con la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y entre sindicatos y patronal:
1. Simplificación de contratos y reducción de la temporalidad «excesiva»; 2. La adecuada regulación de la subcontratas; 3. Reequilibrio de las partes en el ámbito de la negociación colectiva; 4. Establecimiento de mecanismos permanentes de flexibilidad interna de las empresas y de estabilización del empleo inspirado en el ejemplo de los ERTEs como alternativa a la destrucción de empleo.
En opinión de Calviño, la reforma debe contar con «el máximo apoyo» para de este modo recuperar «los consensos rotos en reformas anteriores para que sea eficaz y perdure en el tiempo» (en alusión a la reforma laboral del Ejecutivo de Mariano Rajoy en 2012).
La vicepresidenta primera negó la existencia de una crisis en el Gobierno por la reforma laboral y una pugna con Díaz. Simplemente atribuyó las diferencias a asuntos de «coordinación para asegurarnos de que el Gobierno tiene una posición única y habla con una sola voz».
-¿Aprobaría el Gobierno una reforma laboral solo con los sindicatos para hacer cumplir ese calendario? (Se le preguntó igualmente).
-La reforma laboral es un compromiso del presidente en su discurso de investidura y suscrito en el plan de recuperación respecto a las autoridades europeas. Pero, sobre todo, se trata de una reforma muy necesaria para nuestro país. Y es necesario que se llegue a un acuerdo lo antes posible y que la abordemos lo antes posible para poder dar la máxima seguridad jurídica a todos los operadores económicos y que podamos aprovechar plenamente esta fase expansiva para crear empleo de calidad. Por eso nos hemos marcado un objetivo: adoptar esta reforma antes de fin de año para que a partir de enero de 2022 ya podamos tener este nuevo marco jurídico. (Respondió evasivamente).
Calviño confió igualmente que patronal y sindicatos alcanzarán un acuerdo antes de fin de año.
Preguntada por los malos datos macroeconómicos como la última caída del PIB o la inflación, Calviño prefirió poner la atención en que «el empleo se está recuperando más rápidamente que el Producto Interior Bruto, y que se está produciendo una evolución muy dinámica de la inversión productiva lo cual diferencia esta recuperación económica de la salida de crisis anteriores. Nunca en nuestra historia habíamos tenido una recuperación del empleo tan rápida».
Defendió también que se están recuperando de manera rápida los ingresos fiscales. Por último, insistió en que las previsiones del Gobierno en sus Presupuestos son prudentes y que la recuperación va de «menos a más».
YA VEREMOS.
No hay comentarios:
Publicar un comentario