Nochebuena al volante de un camionero español atrapado en el Reino Unido: «Acabo de hacerme el test y me voy»
Esteban López regresa hasta llegar a París el día de Navidad mientras otros transportistas siguen retenidos en Dover.
El regreso de los transportistas españoles atrapados en el Reino Unido por la crisis derivada de la nueva cepa del coronavirus y el bloqueo a su paso por el túnel de la Mancha se realiza progresiva pero lentamente por el número de conductores afectados. Esteban López se cuenta entre los afortunados: «Acabo de hacerme el test y me voy para abajo», comentaba en esta Nochebuena triste que nunca olvidará.
En su hogar de Lanjarón (Granada), su mujer y su hija de 10 años le esperan para pasar juntos estas fechas señaladas, aunque no llegará tampoco a tiempo de compartir este 25 de diciembre, Navidad. «Estoy en París... intentando dormir algo», ha relatado tras pasarse la noche al volante y hacer su primera escala donde tenía que entregar el lunes su mercancía de retorno, artículos para Amazon.
«La gran mayoría aún no han salido», explica, tras esta experiencia especialmente solitaria, ya que no ha coincidido en Dover con ningún colega conocido.
«Yo firmaba Nochevieja»
En efecto, otros muchos han tenido peor suerte aún. «Hoy, es #Nochebuena, pero para nosotros tiene un sabor agridulce. Queremos compartir con todos vosotros el testimonio de un #conductor profesional que, como otros tantos miles de compañeros, tendrá que pasar esta #navidad en #ReinoUnido #uk, paralizado a la espera de poder volver a su #hogar. Jesús Domingo Gómez Pascual, ¡Mucho ánimo!, para ti para el resto de compañeros que estáis allí y para vuestras familias y amigos. Hoy, nuestros corazones están muy cerca de vosotros». Es el mensaje difundido por el grupo de Facebook «El mundo del transporte».
Este camionero murciano lleva como Esteban López retenido desde el domingo, cuando recibió el aviso y se quedó en un área de descanso 24 horas con este «problemón», para tener al menos cerca un pequeño supermercado y un aseo. Ahora está más cerca del túnel, pero para hacer sus necesidades solo tiene el campo «Yo ya firmaba para estar antes de Nochevieja en casa», se conforma Gómez Pascual, que no comprende cómo les obligan a hacer las pruebas «ahora, en estas fechas de Navidad, cuando
«Si vieran las caras de desolación de mis compañeros, no sabemos para dónde vamos a tirar; anoche nos trajeron una caja con comida, es de agradecer, de una ONG», describe, desesperado además por la incertidumbre de no saber cuánto tiempo tendrá que seguir así.
«Esto es tercermundista, algunos se están quedando sin comida y sin agua, a mí me queda un paquete de agua y tendría que racionar yo para darle a otro compañero», se plantea, en un gesto generoso. «Siempre el camionero paga el pato, el perjudicado de todo, porque como estamos siempre abasteciendo de todo, nos pillan todas las situaciones», apostilla.
ES UN TRABAJO MUY DURO.
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