El Gobierno tumba la ampliación del aeropuerto de El Prat por la falta de apoyo de la Generalitat
El proyecto frustrado prometía crear 83.000 empleos directos con una desembolso de 1.700 millones
El Gobierno ha decidido congelar el proyecto de ampliación del Aeropuerto de Barcelona-El Prat. Así lo ha anunciado este miércoles la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, desde la capital catalana. La inversión, valorada en más de 1.500 millones de euros, se anunció en verano tras la reunión de la Comisión Bilateral Gobierno-Generalitat y causó polémica en Cataluña. El Govern, inicialmente partidario del plan, se echó atrás presionado por la CUP y marcó unas líneas rojas en materia ambiental que, finalmente, han hecho caer la iniciativa.
Según ha reconocido la ministra ante la prensa, las declaraciones de los últimos días hechas por el presidente catalán, Pere Aragonès, criticando la ampliación la han sorprendido porque la Generalitat inicialmente había cerrado su apoyo al proyecto. Raquel Sánchez ha reconocido que con ello se ha «quebrado» la confianza entre ejecutivos en lo que se refiere a la iniaciativa del aeropuerto, aunque ha descartado que ello impacte también en la voluntad de diálogo político que, ha dicho, el Gobierno sigue teniendo con Cataluña.
«Aena y el Gobierno explicaron de forma exhaustiva el proyecto y su impacto. Nuestra propuesta se basaba y se basa en dos aspectos. Convertir el aeropuerto en un 'hub' internacional y hacer un nuevo espacio protegido del Llobregat. Desde el 2 de agosto era un proyecto compartido entre el Gobierno, el Govern y Aena», ha arrancado la ministra desde la Delegación del Gobierno en Barcelona. Asimismo, ha defendido el gran impacto positivo que tenía la propuesta de ampliación del aeropuerto planteado desde el Ministerio tanto para la economía catalana como en el empleo.
La titular de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ha confesado que «como ministra y como catalana» siente tristeza por haber dejado perder esta oportunidad. Además, ha reconocido que el cambio de criterio mostrado por el gobierno catalán en las últimas semanas hace muy difícil que la millonaria ampliación pueda seguir formando parte del plan de inversiones e infraestructuras del Estado para el periodo 2022-2026. «El Gobierno quiere que Cataluña vuelva a ser un motor, pero no va a imponer» ha resumido en una rueda de prensa convocada de forma inesperada esta misma tarde.
Sánchez no solo ha criticado el cambio de posición de la Generalitat. También ha revelado que los representantes catalanes se mostraron favorables al plan en las rueniones y comisiones técnicas que se realizaron antes de anunciar el acuerdo de ampliación. De hecho, la ministra ha anunciado que pedirá que se hagan públicas las actas de dichas reuniones para poner en evidencia el giro dado por el equipo de Aragonès en las últimas semanas. No en vano, el ejecutivo ha pasado de vender la promesa de inversiones como un éxito a anunciar su respaldo a las protestas contra la ampliación de la terminal barcelonesa.
La ministra, que ha prometido que el asunto de El Prato no alterará otras inversiones prometidas en los aeródromos catalanes de Gerona y Reus (Tarragona), ha concluido que, a día de hoy, la Generalitat no tiene una «postura fija» sobre una ampliación lárgamente reclamada por gran parte de los partidos y actores económicos de la comunidad. «Es imposible llevar a cabo un proyecto como este sin un apoyo sin fisuras de la Generalitat. El Govern ha cambiado de posición», ha lamentado la ministra, del PSC y antigua alcaldesa de Gavà (Barcelona), una localidad situada a pocos minutos de un aeropuerto de El Prat que, por ahora, se quedará como está.
YA SE LO DARÁ DE OTRA FORMA
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