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miércoles, 20 de noviembre de 2013

LA NUEVA LEY DE SEGURIDAD GARANTIZA LA IMPUNIDAD DE LAS CASTA

Rajoy asegura que la ley de seguridad pretende“ garantizar la libertad”.

El presidente niega que la norma ponga una "mordaza" a los ciudadanos.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha asegurado este miércoles que la reforma de la ley de seguridad ciudadana que el Ministerio del Interior elevará a un próximo Consejo de Ministros pretende "garantizar la libertad y la seguridad de los ciudadanos". Además, ha negado que se trate de una norma que ponga una "mordaza" a los ciudadanos, como denuncia la oposición.
"Una de las obligaciones del Gobierno es garantizar la libertad y la seguridad de todos los ciudadanos y no es otra pretensión distinta la que pretende esta ley" que prepara el departamento que dirige Jorge Fernández, ha dicho el presidente. La ley, aún en fase de anteproyecto, se debatirá en el Parlamento cuando ya sea proyecto de ley "y todo el mundo podrá dar sus argumentos", ha zanjado Rajoy.
La nueva normativa conlleva castigos de tipo administrativo para quienes participen en un escrache, se manifiesten sin permiso ante el Congreso, quemen contenedores, insulten a un policía y hagan tratos con prostitutas en espacios públicos próximos a colegios, además de otras medidas. Esta ley pretende acabar con la impunidad de algunas de estas conductas que, pese a los intentos del Gobierno, no han merecido ningún reproche penal por parte de los jueces. Concentrase o reunirse sin permiso ante Las Cortes será una infracción muy grave castigada con una sanción de entre 30.001 euros y 600.000 euros.
COMENTARIO:
Sr. Rajoy, en democracia es normal que la gente manifieste su voluntad y haga visible su enfado cuando se hacen leyes que les afectan y no le gustan: Eso no es delito alguno, tenga en cuenta que no dispone de otros medios que la calle y su presencia para exteriorizar su enfado y que los demás conozcan los motivos. La única limitación que se puede considerar, es la violencia física, violencia que las fuerzas del orden traspasan con relativa facilidad y con suma frecuencia. Es más, muchas veces los instigadores verdaderos de las luchas callejeras tuvieron su origen en provocaciones dirigidas por la propia policía o infiltrados de paisano con el fin de justificar su disolución. Gobernar es convencer, distribuir y aplicar con sentido de la equidad y justicia, cuando no se obra así, es normal que el panorama se enrarezca y existan manifestaciones. No podrá negar que está gobernando la contestación ciudadana ha subido un montón. No lo estará haciendo bien, pero si encima trata de reprimirlas con leyes mordazas, aun lo estará empeorando más.
España es un país visceral y conservador. Lo explicaba Pérez-Reverte con el que estoy plenamente de acuerdo en este punto. España eligió el catolicismo al luteranismo en el siglo XVI y eligió el absolutismo a la Ilustración y el liberalismo en el XIX. Y si ahora le das a escoger elegirán PPSOE y monarquía. Siempre, casi siempre el español es “virgencita, virgencita, que me quede como estoy”. El español se acojona cuando hay que echar un órdago. De todas formas creo que sigue habiendo mucha ignorancia.

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