Tensión e insultos en el acto de Ciudadanos en Alsasua en apoyo a la Guardia Civil.
Albert Rivera reclama la unidad de los constitucionalistas en la plaza de la localidad navarra donde en 2016 fueron agredidos dos agentes, mientras un millar de personas se concentra en contra.
El centro de la localidad estaba blindado por agentes antidisturbios de la Policía Foral y la Guardia Civil desde las nueve de la mañana. Todos los accesos se encontraban controlados por docenas de patrullas, y un helicóptero policial vigilaba desde el aire, en previsión de que se pudieran producir altercados. Medio centenar de militantes de Ciudadanos, del PP y de Vox, que se habían desplazado en autobuses y en vehículos particulares han sido escoltados por los agentes hasta una gasolinera situada 10 minutos del pueblo tanto a su llegada, como cuando han abandonado el lugar.
Un grupo de vecinos de Alsasua, que el día anterior había pedido serenidad "frente a la agresión" de la "extrema derecha", han logrado situarse por delante de los policías, junto a los grupos antifascistas para frenar su avance e impedir cualquier tipo de contacto entre los seguidores de unos y otros.
A la convocatoria de Rivera han asistido la presidenta del PP Navarro, Ana Beltrán, acompañada por el portavoz del Grupo Popular en el Senado y ex director general de la Policía Nacional Ignacio Cosidó y del presidente del partido de extrema derecha Vox, Santiago Abascal. En el acto han intervenido el presidente de la formación naranja, el escritor y filósofo Fernando Savater y la víctima de ETA Beatriz Sánchez Seco.
Esta manifestación de apoyo a la Guardia Civil, organizada por España Ciudadana, ha tenido lugar unas horas después de que el sábado por la tarde se organizara una marcha en esta localidad con el lema Dejad en paz a Alsasua, en la que miles de personas protestaron contra la presencia de estos partidos y de sus líderes.
También el sábado, los populares vascos se descolgaron de la convocatoria de esta mañana. Su portavoz, Borja Semper, aseguró que era un acto “de propaganda política” que no contribuía a serenar los ánimos y del que “no se podía sacar nada constructivo”. Ese mismo día, Abascal criticó en Bilbao con dureza al presidente del PP vasco, Alfonso Alonso, por desmarcarse del acto, y volvió a criticar al PP de Pablo Casado como la “derechita cobarde”. En esta ocasión no atacó a Albert Rivera, a cuyo partido denomina la “veleta naranja”.
El líder de Ciudadanos ha mostrado su apoyo explícito “a los dos agentes y a sus parejas agredidos” en 2016 y ha asegurado que “cuando agreden a un guardia civil, agreden a la Constitución, agreden a la convivencia y están intentado liquidar el Estado". Y ha añadido: "El día que los demócratas seamos indiferentes a los que violan la democracia se acabará la democracia, por eso es importante que estemos hoy aquí en Alsasua".
Rivera ha pedido unión a todos constitucionalistas del siglo XXI para construir una Europa y una España fuerte, pero sin partidos populistas. Pese a la presencia de los dirigentes de Vox entre los 500 asistentes al acto, el líder de la formación naranja ha dicho que van "a luchar sin tregua contra el populismo, contra el radicalismo y los extremismos". "Queremos vivir en un país sin etiquetas. Démonos la mano para construir el constitucionalismo del siglo XXI”, ha reclamado.
Dos años después de la agresión a los agentes, siete jóvenes están encarcelados, con condenas que oscilan entre los dos y los trece años. Tres de ellos llevan más de 700 días en prisión, aunque no por un delito de terrorismo como pedía la fiscalía, sino por un delito de odio.
Casado recuerda que él ya fue hace cuatro meses a Alsasua "sin tanto ruido"
Eva Sáiz, Sevilla
“Nosotros estamos presentes en Alsasua. Siempre que haya que defender la Constitución. Frente a los batasunos y los independentistas, estará el PP”, ha señalado el presidente popular, Pablo Casado, este domingo durante un acto con jóvenes de Nuevas Generaciones en Sevilla.Casado, no obstante, ha querido marcar distancias respecto de Ciudadanos, el organizador de la concentración en el municipio navarro. “Nosotros fuimos hace cuatro meses al cuartel a abrazar a sus agentes y decir que Navarra no se iba a convertir en anexo de nadie. Lo hicimos sin necesidad de hacer ruido, porque es lo que llevamos haciendo hace cuatro décadas y nadie nos va a dar ahora lecciones de nada”.
LOS SEPARTISTAS SON DESTRUCTORES DE ESPAÑA
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