Borrell condiciona el apoyo al Brexit a mayores garantías sobre las relaciones con Gibraltar.
El Gobierno quiere que la declaración política sobre la relación futura con el Reino Unido deje claro que las negociaciones sobre Gibraltar quedan fuera del ámbito de la Unión Europea.
Se diría que los gibraltareños le han colado un gol al Gobierno español en las negociaciones sobre el Brexit. Un arttículo introducido misteriosamente en el acuerdo de retirada del Reino Unido que suaviza el concepto de que el futuro de la Colonia depende solo de lo que decidan los gobiernos de Londres y Madrid ha provocado la mayor irritación en el departamente que dirige Josep Borrell, que esta tarde se ha reunido en Bruselas con el negociador europeo, Michel Barnier para exigir que el texto se clarifique, o de lo contrario «no podremos dar nuestro acuerdo».
Según Borrell, «el artículo 184 ha aparecido de la noche a la mañana» y a los ojos de la posición española «nos despierta dudas y queremos que se clarifique su interpretación que tiene que ser clara. La negociación sobre la relación futura con el Reino Unido es distinta de la negociación sobre Gibraltar. Como todos los artículos que se escriben es interpretable y queremos clarificación. Queremos que las cosas queden claras porque a la hora de la verdad todo son líos y problemas».
La versión más razonable de cómo ha sido posible la aparición de ese artículo es una gestión del propio Gobierno británico a instancias de los dirigentes gibraltareños, que según fuentes diplomáticas españolas lo conocieron antes que el ministerio de Exteriores de España. Este detalle ha añadido un motivo más de irritación para el ministro Borrell.
El artículo en cuestión no menciona a Gibraltar, sino que habla vagamente del espíritu que debe regir en las negociaciones futuras entre la UE y el Reino Unido. Lo que España quiere es que especifique que ese párrafo no se aplica al caso de Gibraltar, cuyo futuro será decidido directamente entre Londres y Madrid y que se fijará en un anexo al tratado futuro.
ESPAÑA LO VA TENER MUY DURO Y CON LOS INGLESES SOMOS ETERNOS PERDEDORES.
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