NO QUIERO LE IA EN MI TELÉFONO. por José Ángel Miyares Valle.

 

NO QUIERO LE IA EN MI TELÉFONO.

No la he pedido ni le he dado permiso para infiltrarse como una aplicación más sin permiso alguno , esta disfrazada en forma de un arito insignificante  que no soy capaz de quitarla y dice que hable con  su asistente para quitarla, lo que hace es confundirte  y no hay forma de hacerla desaparecer  ¿Quién le ha dado permiso para invadir mi intimidad? se mete  en mi casa como un espía, pues hay miles de teléfonos invadidos por esta lacra que no quiero en mi teléfono pagado por mi  y en mi internet también , esto es el colmo, he pasado por expertos para intentarlo quitar y es imposible, le digo a  ese asistente online  que igual que invadió mi teléfono  se marche y me da instrucciones erróneas  para quitarlo , me vuelve  loco , ni los expertos  saben como quitar ese arito que anda a su aire por el wasap como paco por su casa y se traba en todos los contactos diciendo que le pregunte sobre cosas que él te va orientar  ¿Dónde queda mi intimidad? y luego hacen  tantas leyes para proteger nuestra intimidad de ¿Qué? Me saquee el gobierno con impuestos lo que hacen por ley para echarlo a veces en golfadas, bebidas y orgias con elixires del amor  , me invade la IA sospechosa cómplice del gobierno , todo es quitarme la libertad, soy  una persona que quiere vivir a su aire, pues eso no le sirve, me están haciendo la vida imposible en la tierra y tienes que tener el teléfono para todo, es obligado, pero lo pagas tú y los espías invaden también por sus cataplines,  encima te toman por imbécil, se está creando un mundo insoportable, la gente se vuelve loca , esto tiene que terminar muy mal porque nos están destrozando la humanidad  en este  planeta, los muy ricos, jefes del nuevo orden mundial , nadie habla claro o no están tan al día para poder decir algo, pero los políticos viven de nuestros impuestos como si fueran una losa pesada sobre nuestras espaldas y nosotros vivimos esposados a la crueldad y miseria  sin más, esperando que nos socorran.

José Ángel Miyares Valle.