«Si se produce, claro, bajo las circunstancias adecuadas. Lo haría», aseguró el presidente de EE.UU. en una entrevista con Bloomberg. Por otro lado, Trump dio por terminada abruptamente una entrevista a la CBS cuando se le preguntó por las intervenciones telefónicas
El presidente de EEUU, Donald Trump, afirmó este lunes que estaría dispuesto a reunirse con el líder norcoreano, Kim Jong-un, «bajo las circunstancias adecuadas», en medio dela escalada de tensión con Pyongyang por su reiteradas pruebas de misiles y su programa nuclear.
«Si se produce, claro, bajo las circunstancias adecuadas. Lo haría», aseguró Trump en una entrevista con Bloomberg sobre su posible reunión con Kim, un día después de reconocer que no excluía la opción militar ante las continuas provocaciones del régimen norcoreano.
Este lunes, el presidente también concedió una entrevista a la cadena CBS pero fue interrumpida cuando el periodista John Dickerson le preguntó por las denuncias de intervenciones a sus teléfonos, según infoma la cadena CNN.
Trump dio a entender que Obama intervino sus teléfonos en la Torre Trump antes de la victoria.
Los asesores del expresidente Barack Obama, funcionarios de inteligencia y algunos legisladores republicanos desafiaron esa denuncia.
Cuando Dickerson mencionó el asunto, Trump dijo: «Creo que nuestra posición ha sido probada fuertemente y todo el mundo está hablando de eso y francamente, debe ser discutido». Trump añadió: «Deberíamos averiguar qué diablos es lo que está pasando».
Cuando Dickerson lo presionó, Trump dijo: «Puedes tomarlo como quieras».
Dickerson le insistió: «Le estoy preguntando porque usted no quiere que haya noticias falsas. Quiero escucharlo del presidente Trump».
Trump dijo: «Usted no tiene que preguntarme a mí».
Dickerson: «¿Por qué no?»
Trump: «Porque yo tengo mis opiniones, y tú puedes tener tus opiniones».
Dickerson: «Pero quiero saber sus opiniones. Usted es el presidente de EE.UU».
Trump: «Eso es suficiente. Gracias. Muchas gracias».
El presidente se alejó de Dickerson y se sentó en el escritorio de la Oficina Oval.
Este abrupto final marca una división de las otras entrevistas más amables que ha tenido el presidente últimamente.
ESTOS BANDAZOS DESCONCIERTAN A LOS ESTADOUNIDENSES, PARECE QUE NO TIENE UNA SEGUIRDAD Y CLARIDAD DE MANDO EN LA POLÍTICA INTERNACIONAL.
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