LA VEJEZ EN SOLEDAD

 L A SOLEDAD EL ESTIGMA ACTUAL

vejez es solo cuestión de tiempo; si tienes la suerte de llegar, te darás cuenta que todo pasó en un sueño.

Uno se da cuenta que se hace viejo al experimentar cambios físicos y por algún nieto que te lo recuerda. El envejecimiento puede variar de persona a persona, pero algunos signos comunes incluyen arrugas, pérdida de energía y cambios en la memoria y de movilidad. Aunque la prueba del ocho para hacerte saber que eres viejo es cuando el número de amigos que no están supera en número a los que están. Es la parte más cruel de la vejez, ir despidiendo amigos y familiares. Por lo demás, diría que también puede ser una época de paz, de tranquilidad por el deber cumplido, con los muchos errores incluidos (sepan perdonarse a sí mismos, somos todos imperfectos) la vejez es tiempo de sabiduría por la experiencia acumulada que dan los años. Ya lo decía Ramón Pérez de Ayala: “Más sabe el diablo por viejo que por diablo”.

Las prioridades son diferentes que cuando joven, disfrutas de otro modo más contemplativo; eso sí, tienes que seguir comprometido con la vida, con la sociedad, no convertirte en pasota de todo lo que ocurre a tu alrededor, las conversaciones profesionales se reemplazan con amigos y familiares (salvo que en esas conversaciones esté incluido Sánchez, el encantador de señorías y señoras), pueden ser pasatiempos de odiseas vividas, estas solo la edad las proporciona.

Jamás en la historia la política ha estado marcada por discusiones tan controvertidas, donde un presidente (que lo es gracias a un pacto indecente con delincuentes) es defendido por personas que aprecias y que no crees posible tener que discrepar con ellas en este tema, cuando antes fueron personas implicadas en la legalidad, el respeto y la palabra dada. La corrupción no se puede defender jamás, eso me rechina mucho. No puedo con ese “y tú más”. “Lo malo jamás justifica lo peor”.

Cómo ven, setenta años no son nada si sigues implicado con la sociedad, con la defensa del Estado de derecho y la igualdad de todos ante la ley. No puedes ser ejemplo de nada para tus hijos y nietos si ven que aceptas, asumes y hasta defiendes que tu gobierno esté descompuesto por un pacto con fugados de la justicia, que para más indecencia Pedro les borra los delitos (sedición, malversación, alteración del orden, saqueos, terror callejero, saltarse las normas que entre todos nos dimos, apedrear a policías incluso tirados en el suelo, agredirlos, desobedecer órdenes...) En fin, todo eso no lo juzga un juez, lo blanquea Pedro el justo, saltándose el poder judicial y la igualdad de todos ante la ley. Ni un tirano lo haría mejor. No se puede aceptar de ninguna manera que los mismos beneficiados por la amnistía sean los que la impongan. Es corrupción institucional sin límite.

Alguno lo compara con las protestas mineras o ahora los agricultores y ganaderos, no señor, estos luchaban y luchan por el pan de sus hijos, derecho que recoge la constitución a un trabajo digno. Mientras, los independentistas llevaron a cabo un golpe de Estado en toda regla, sin respeto por la Constitución y las normas establecidas.

Necesitaba decir esto, pero animo a todos a llegar a viejo; a los que ya lo son, simplemente darles la enhorabuena, lograron sortear dificultades, enfermedades y obstáculos, no se debe mirar atrás. La vida misma a veces es cruel y dura, pero también llena de amor, deseo, placer... No tienes opción, aprende a sacar lo mejor de ella, lo mejor no está en poseer, está en saber rodearte de personas que te hagan feliz, las tóxicas debes desprenderte de ellas. Está en comprometerte contra las injusticias, fiscalizar el poder corrupto y denunciar sin miedo a quien trate de pisotear personas y legalidad. Un abrazo a todos esos viejos por saber hacer un mundo mejor. Ahora lo vemos desmoronarse en forma de insolidaridad, egoísmo, falta de valores, cobardía y conformismo.