Iglesias dice ahora que «quizás» se equivocó al designar a dedo a Yolanda Díaz como sucesora
El exvicepresidente anunció en marzo del año pasado que la ministra de Trabajo sería la próxima candidata a las elecciones sin comunicárselo a ella, una decisión que tenía clara desde verano de 2020
La reflexión es nueva; y de hecho, ni siquiera la plantea en su último libro, un testimonio de sus últimos años en política. Pablo Iglesias dice ahora que «quizás» se equivocó al designar a dedo a Yolanda Díaz como su sucesora. Lo hizo sin comunicárselo tan siquiera a ella, en aquel vídeo del pasado 15 de marzo donde anunció que dejaba el Gobierno para presentarse a las elecciones de la Comunidad de Madrid.
La situó directamente como la nueva vicepresidenta y la futura candidata electoral de Unidas Podemos. «No tengo claro que fuera lo correcto —ha dicho Iglesias, hoy reconvertido en columnista y tertuliano político—. Quizás lo que tendría que haber hecho era dejar en manos de los partidos para queorganizaran unas primarias, quizás hubiera sido mucho más previsible y democrático que dar mi opinión, que decir 'creo que esta compañera si ella lo decide debe estar al frente'.
Quizás me equivoqué y quizás eso no fue un acierto».
Las declaraciones las ha hecho en RTVE. Su primera entrevista desde que dejó la política y con motivo de la publicación del libro 'Verdades a la cara. Recuerdo de los años salvajes' (Navona Editorial). Reflexiones y recuerdos que el periodista Aitor Riveiro edita después de horas de entrevistas con el expolítico. En sus páginas, habla de cuando señaló a Díaz como sucesora.
Iglesias ha defendido en la televisión que hizo lo que creía «correcto» en ese momento: «Entendía que la persona que debía hacer esto era Yolanda». No se arrepiente de haberse significado a favor de la ministra de Trabajo, a la que considera que está «esplendida» como vicepresidenta. «Se gusta y se nota», dice en su libro. Según ha explicado, en aquellos días desestimó abrir un proceso interno de elección porque vio posible que Díaz no quisiera participar. Y precisamente por esa misma razón no le comunica que la va a propulsar, por si ella se negaba.
En el libro que se publica la semana que viene, Iglesias asegura que desde el verano de 2020 tenía claro que la ministra Díaz tendría que ser su sucesora para las próximas elecciones generales. «Había que encontrar el momento preciso. Y el momento se presentó», asegura Iglesias. También explica que cuando decide dejar el Gobierno para salvar a Podemos en la Comunidad de Madrid, en su equipo de máxima confianza valoran a Irene Montero o Alberto Garzón para la Vicepresidencia Segunda. Se descartan rápidamente porque Montero arrastraba desgaste y además tenía pendientes leyes fundamentales para Podemos al frente del Ministerio de Igualdad. Y en Izquierda Unida no estaban de acuerdo con que Garzón diera ese salto.
Esta semana Yolanda Díaz e Íñigo Errejón, ex de Podemos, formalizaron un acercamiento. Díaz no aspira solo a reconstruir Unidas Podemos con Más País, Equo y Compromís, sino que busca ampliar las bases de lo que fue. El acto de esta semana, a pesar de ser sobre salud mental y precariedad laboral, acerca posiciones. La relación entre Podemos y Errejón es mala, pero asumen que la unidad es inevitable si apuestan por crecer. «Calladito estoy más guapo», ha dicho Iglesias, preguntado por esta alianza electoral en la que trabajará Díaz para su proyecto.
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