Los nacionalistas catalanes se rebelan contra la Ley de Seguridad Nacional que prepara Pedro Sánchez
ERC registra una proposición de ley para derogar la legislación vigente y el PDECat avisa de que, tal y como está redactado el borrador del Gobierno, no lo apoyará.
Dirigentes de diversos partidos nacionalistas, varios de ellos socios del Gobierno de coalición, han exhibido este martes su profunda desconfianza ante la reforma de la Ley de Seguridad Nacional que prepara el Ejecutivo. Ninguno de ellos ha avanzado un respaldo a los planes de Moncloa y desde ERC, el PDECat y la CUP han sido muy críticos con la redacción del borrador actual.
El portavoz republicano en el Congreso, Gabriel Rufián, ha anunciado en rueda de prensa que su grupo iba a registrar hoy mismo una proposición de ley en la Cámara Baja para derogar la legislación vigente. Algo que ha hecho horas después el Grupo Republicano.
Hoy publica ABC cómo el borrador del Ejecutivo se inspira en dos leyes venezolanas, y entre otras cosas prevé que el Ejecutivo pueda recortar derechos y libertades, en pro de la seguridad nacional, sin someterse al control parlamentario. Rufián ha dejado claro que desde ERC siempre estarán «en contra de marcos legales que atenten contra derechos fundamentales». «Mientras en este país haya una sola persona perseguida y encarcelada por sus ideas, este Gobierno no podrá declararse de izquierdas de una manera verídica», ha dicho.
Sin entrar en la comparativa con Venezuela, el portavoz del PDECat en el Congreso, Ferran Bel, ha aseverado que tal y como está planteada la ley que prepara el Gobierno, no recibirá el aval de su partido. «Nos parece un despropósito. En algún momento pensábamos que era un globo sonda», ha añadido el diputado independentista, quien ha subrayado que o hay grandes modificaciones, o el PDECat no se replanteará su voto.
También desde la CUP el diputado Albert Botran ha advertido de que no secundarán «ninguna ley que suponga un giro autoritario del Estado». Un Estado, ha dicho fiel a las soflamas separatistas, «que ya tiene muchas carencias democráticas». «Ofrece un catálogo muy peligroso de regresiones democráticas», ha apuntado el parlamentario del independentismo radical.
En Común pide tiempo para el Gobierno
Joan Baldoví, de Compromís, no se ha mojado y ha afirmado que aún no tienen una posición definida al respecto, aunque ha señalado que no hay problema en la comparación con un país u otro; que lo único que importa es el contenido y lo estudiarán. Mientras, Aina Vidal, diputada de En Comú Podem, ha reclamado que se dé tiempo al Gobierno de coalición para trabajar y que ya se valorará el anteproyecto de ley una vez esté encima de la mesa. Vidal ha defendido además la derogación de la 'ley Mordaza' -como conocen sus detractores a la Ley de Seguridad Ciudadana- como un «punto clave», así como la introducción de aspectos en materia de ciberseguridad.
Desde Podemos por ahora prefieren guardar silencio y esperar a que ese borrador avance y se concrete en un anteproyecto de ley. Preguntada en rueda de prensa, la diputada Sofía Castañón ha recordado una frase que dice habitualmente la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz -líder de Unidas Podemos en el Gobierno-, y ha expresado: «Donde hay papeles, las barbas se callan». «Cuando veamos papeles, podremos opinar», ha sentenciado.
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