Austria exige una corrección inmediata en el reparto europeo de vacunas
En la UE, las vacunas no se distribuyen según la proporción de la población, sino según la cantidad solicitada. Desde el punto de vista del canciller austriaco, Sebastian Kurz, se trata de un gran error que hay que corregir de inmediato.
En la UE, las vacunas no se distribuyen según la proporción de la población, sino según la cantidad solicitada. Desde el punto de vista del canciller austriaco, Sebastian Kurz, se trata de un gran error que hay que corregir de inmediato. Así lo ha transmitido ya a los gobiernos de varios socios europeos, aunque el rechazo de Berlín a la modificación que propone supone por ahora un bloqueo insalvable. En la reunión del Consejo Europeo de mañana jueves, Kurz insistirá en el asunto y denunciará «el hecho de que la brecha dentro de la Unión Europea en términos de vacunación de la población sigue aumentando. En su opinión, «así estamos creando Estados miembros de la UE de segunda clase.
Sin citarlos, Kurz se está recibiendo a avances como el de Dinamarca, en situación de semiconfinamiento desde hace tres meses y que ya ha publicado su plan progresivo para eliminar las restricciones a partir del momento en el que los mayores de 50 años queden vacunados, fecha fijada para finales de mayo. En ese momento, además, habrá ya implementado el pasaporte de vacunas, permitiendo a sus ciudadanos moverse libremente no solo en el interior de su país, sino a lo largo y ancho de Europa, a diferencia del resto de los europeos que seguirán sufriendo restricciones a su libertad de movimientos.
El gobierno francés, por su parte, espera también que el avance de la campaña de vacunación le permita levantar las restricciones para abril-mayo. «Sin un cambio de rumbo, algunos Estados miembros ya alcanzarían la llamada inmunidad colectiva a finales de mayo, mientras que otros países no lo conseguirían hasta finales del verano o hacia finales de año», se queja Kurz, que añade en una entrevista publicada por 'Die Welt' en Alemania que «los ciudadanos de Europa esperan con razón que encontremos una solución a la distribución de vacunas, porque la solidaridad dentro de la Unión Europea está en juego».
Bulgaria, Croacia, Letonia, Eslovenia y la República Checa también se han sumado a esta denuncia de Austria. Alemania, sin embargo, está en contra de la redistribución de vacunas en la Unión Europea, como ha dejado claro el secretario de Estado de Europa, el socialdemócrata Michael Roth. Roth señala que Austria y algunos otros países europeos no han agotado los contingentes de vacunas a los que tenían derecho en función del tamaño de su población por decisión propia. Apunta que esas cantidades de vacunas no capitalizadas se ofrecieron a otros países de la UE, de manera que los países que solicitaron dosis adicionales pudieron recibirlas, y que no hay razón ahora para cambiar el procedimiento de distribución.
«Esta es una cuestión sumamente política que no se puede resolver a nivel técnico. Por tanto, plantearé esta cuestión junto con otros Estados miembros que también quieren resolver este problema en la videoconferencia del Consejo Europeo del jueves, si para entonces no se ha encontrado una solución satisfactoria para todos los Estados miembros», ha adelantado el austriaco Kurz, que reafirma, por otra parte, el objetivo de la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen. «Totalmente respaldada», dijo, respecto a la meta perseguida de que el 70% de todos los adultos estén vacunados antes del verano.
Desde mediados de marzo, seis países de la UE están solicitando un «mecanismo de corrección» porque se sienten en desventaja en la asignación de vacunas. La presidenta de la Comisión de la UE, Ursula von der Leyen, ha sugerido utilizar diez millones de dosis adicionales de la vacuna de Pfizer para el segundo trimestre como compensación.
Roth se niega, por parte de Alemania, a hacer tales correcciones y la decepción austriaca ha llevado al gobierno de Kurz a «dejar de depender en el futuro de la Unión Europea» en este ámbito. Austria trabaja en un proyecto de cooperación con Israel para la producción de fármacos para nuevas mutaciones del coronavirus, según ha anunciado el canciller. «Los expertos calculan que se necesitarán vacunas anuales para cerca de seis millones de austriacos y por eso cooperaremos estrechamente con Dinamarca y con Israel en la investigación y producción de vacunas», ha dicho, después de haber visitado Israel junto a la primera ministra danesa, Mette Frederiksen, a principios de marzo. Ambos se reunieron con el primer ministro Benjamín Netanyahu con el fin de «acelerar la producción y adquisición de vacunas para el futuro». Kurz cuenta que con que «con la vacunación volveremos a la normalidad en verano, pero la pandemia seguirá preocupándonos por las mutaciones, que requerirán seguramente nuevas vacunas y tratamientos (…) Tenemos que prepararnos para esto con antelación, para esa fase posterior al verano».
ESTA COMPAÑIA ALGO ESCONDE
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