El Gobierno creó una plaza en Panamá para el jefe de escolta de Aznar
El Gobierno creó una plaza en Panamá para el jefe de escolta de Aznar
La designación se formalizó en agosto de 2014, cuando en realidad el puesto fue creado ocho meses más tarde
El inspector jefe de policía Francisco Gabriel Maroto Almarcha, responsable del servicio de escolta del presidente del Gobierno José María Aznar, fue nombrado agregado de Interior en la Embajada de España en Panamá en 2014, antes de la creación del puesto, según la documentación de la Dirección General de la Policía y el Ministerio del Interior. Maroto fue el jefe de la escolta de Aznar entre 2002 y 2004, cuando era presidente del Gobierno y entre 2004 y 2014, cuando ya no estaba en La Moncloa.
El cargo ya tenía nombre y apellidos predeterminados en julio de 2014. La designación se formalizó, a pesar de las contradicciones que exhiben las órdenes y actas a las que ha tenido acceso EL PAÍS, el 22 de agosto de 2014, cuando en realidad el puesto fue creado ocho meses más tarde, el 10 de abril de 2015.
Esta semana, según fuentes judiciales, la sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJCM) tiene previsto celebrar la vista del recurso de uno de los tres aspirantes contra el procedimiento de designación del que fue jefe de escolta de Aznar para ocupar un puesto, el de Panamá.
La historia se remonta al 8 de mayo de 2014, cuando la Dirección General de la Policía anunció la convocatoria pública para la provisión de plazas por el sistema de libre designación de consejeros y agregados de Interior en diferentes representaciones diplomáticas de España en el extranjero. Una de ellas era la de Panamá.
Las plazas de consejeros son ocupadas por comisarios y jefes superiores, mientras que las de agregados se suelen conceder a inspectores. La diferencia de salarios entre lo que se cobra en España y en el extranjero suele ser uno de los atractivos, pero no el único. El trabajo permite tener acceso a información, ya que la tarea de seguridad del cuerpo diplomático recae en subinspectores y policías de menor rango.
El 3 de julio de 2014, según reza en el acta de la reunión de la comisión de destinos en el exterior del Ministerio del Interior, presidida por Francisco Martínez, secretario de Estado de Seguridad, el director general de la Policía, Ignacio Cosidó, presentó a los candidatos designados para las nuevas consejerías y agregadurías de Interior. Para Panamá fue el inspector jefe Francisco Maroto Almarcha. Normalmente, se suele estudiar una terna de aspirantes. En el caso de Panamá, según ha sabido este periódico, había otros dos interesados.
El 22 de julio de 2014, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, firmó el nombramiento de 26 consejeros y agregados, de la Policía y la Guardia Civil, en 22 países. Pero Panamá no figuraba entre ellos. Un mes después, el 22 de agosto de 2014, la Dirección General de la Policía resolvió la convocatoria, adjudicó los puestos a los funcionarios, “declarando desierto el puesto de agregado de Interior de Ghana”. Panamá, por tanto, había sido adjudicada.
El inspector jefe Carlos Parro, destinado en inteligencia financiera en el Servicio Ejecutivo de la Comisión de Blanqueo de Capitales, aspirante a Panamá, presentó el 29 de agosto, un recurso de reposición contra la adjudicación de la plaza al inspector jefe Maroto. Aunque se trata de un puesto de libre designación, argumentaba, que tenía los méritos que se exigen y solicitó conocer el historial del adjudicatario.
La Dirección General de Policía desestimó el recurso el 12 de noviembre de 2014. Si bien señaló que se exigen criterios de “idoneidad” para el cargo, es su potestad incluso nombrar a la persona que no haya obtenido la más alta puntuación y no tiene por qué motivar su decisión. Añadió que el historial del adjudicatario es privado y confidencial. Por tanto, si algo parece claro es que la plaza está adjudicada. El inspector Parro interpuso entonces la demanda ante el TSJCM, que toca a la sección séptima.
Agregadurías
Finalmente, el Gobierno aprobó un real decreto el 10 de abril de 2015 y creó dos agregadurías. Una de ellas es la de Panamá. Cuatro días después, el 14 de abril de 2015, en el procedimiento del TSJCM, Juan Rueda Menéndez, secretario de la Comisión de Destinos en el Exterior del Ministerio del Interior, aclaró a petición de Parro, dos puntos: primero, el ministro Fernández Díaz no designó agregado de Interior en Panamá en julio de 2014 “por estar en ese momento en proceso de creación” la plaza; segundo, “no consta la relación de otros funcionarios concurrentes al puesto de trabajo de agregado de Interior en Panamá, no constando tampoco, por tanto, la valoración la valoración de cada uno de ellos”.
El escrito de Rueda concluye que “la petición que hace el recurrente parece estar basada en un error de prueba ya que hasta el día de la fecha no se ha producido el nombramiento de funcionario alguno para el puesto de trabajo de agregado de Interior de Panamá”.
Días después, el 6 de mayo de 2015, la Dirección General de Policía resolvió, según se dice, “definitivamente” la convocatoria. Ahora señala que en la resolución del 22 de agosto había quedado “sin adjudicar el puesto de agregado de Interior de Panamá”. Y añadió: “Nombrado por el ministro del Interior el adjudicatario [el inspector Maroto] del puesto pendiente de adjudicar, esta Dirección General ha dispuesto resolver definitivamente la convocatoria pública adjudicando el puesto de agregado de Interior de Panamá al funcionario”.
En junio de 2015, por tanto, el inspector Maroto se incorporó a su puesto de agregado de Interior en Panamá. A un puesto que desde su gestación ya era suyo en un procedimiento sobre el que tendrá que decidir el Tribunal Superior de Justicia de Madrid.
EN UNA DEMOCRACIA CUANDO LO POLÍTICOS SE CREEN DIOSES Y GOBIERNAN DE ESPALDAS AL PUEBLO FRACASAN.
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