OCIO NOCTURNO TEME UN DESCONTROL DE CASOS ANTE LA PROHIBICIÓN DE FIESTAS DE NOCHEVIEJA EN MEDIA ESPAÑA

 El ocio nocturno teme un descontrol de casos ante la prohibición de fiestas de Nochevieja en media España

La disparidad de medidas entre comunidades autónomas castiga a un sector que tenía el 31 de este mes señalado en el calendario

Las previsiones apuntan a que este año se facturará un 57,3% respecto a lo que ganaron en 2019

Si hay un sector que ha estado siempre en el punto de mira ante la pandemia, es el del ocio nocturno, el último en reabrir y el primero en volver a cerrar de nuevo en algunos territorios. Pese a la falta de medidas adoptadas durante el crecimiento de la que ya es la sexta ola de coronavirus en España, a escasos días de finalizar el año, son varias las comunidades autónomas que han apuntado hacia un sector que presume de seguro mientras las alternativas, según cuentan, pasan por reuniones ilegales como botellones o entornos poco fiables ante los contagios, como pisos y espacios cerrados privados.

Tal y como defienden desde España de Noche, la patronal de empresarios del ocio nocturno, media España podrá festejar el fin de año mientras que la otra media está abocada a suspenderlo.

Comunidades autónomas como Asturias, Cantabria y Cataluña lo han clausurado. Otras, como Galicia, Baleares, Murcia, País Vasco, Navarra, La Rioja Aragón y Canarias apuestan por adelantar su cierre entre la 1.00 y las 3.00 horas, mientras que Andalucía, Baleares y Comunidad Valenciana exigen para acceder a estos recintos el pasaporte Covid.

Las previsiones que manejan los empresarios dedicados al sector del ocio nocturno son de un 57,3% respecto a lo que facturaron en 2019. En este sentido, la venta anticipada en estos momentos es de un 28,3% frente al 38,1% de 2019, el último antes de la pandemia. Desde la patronal, sin embargo, confían en remontar los resultados con las reservas de última hora y la compra en taquilla. «La sensación que tenemos es de frustración por no haber conseguido hacer entender a determinadas comunidades autónomas que la actividad reglada sigue siendo la mejor alternativa para una celebración como la de Nochevieja», cuenta Vicente Pizcueta, portavoz de España de Noche. En este sentido destaca que, frente a los «macrobotellones o pisos hacinados», los locales tienen una «oferta más contenida, sin masificaciones» y con la posibilidad de destinar espacios reservados y palcos para garantizar la distancia de seguridad con los grupos de convivientes. «Quien apueste por nosotros se sentirá privilegiado de poder celebrar el cambio de año con las mejores garantías», explica Pizcueta.

Sobre el adelanto del cierre en algunas regiones, para España de Noche no se trata mas que de un «cierre encubierto, sin ninguna planificación y sin acompañar la decisión de medidas económicas». Siempre habrá, recuerda su portavoz, quien recurra a la creatividad, y probablemente haya locales «que abran a media tarde, den las campanadas y cierren a las 2.00 horas», aunque serán solo casos puntuales. De facto, este adelanto en el cierre es, «una prohibición de la Nochevieja», denuncia Pizcueta, que recuerda que la movilidad nocturna asociada a este ocio apenas supone un 3%, mientras que algunas autonomías continúan estigmatizando a todo un sector.

En los juzgados

Antes de que llegue la fecha que muchos de estos locales tienen señalada en el calendario, la de la noche del 31, los tribunales regionales aún tendrán que resolver las medidas cautelarísimas solicitadas por los empresarios, que ven injusto el adelanto en el cierre. La Asociación de Salas de Fiestas, Discotecas y Ocio Nocturno de la Rioja, integrada en la Federación de Empresas de La Rioja (FER) mostró este mismo miércoles su «total desacuerdo sobre las medidas restrictivas que ha acordado el Gobierno de La Rioja, coincidiendo con las fechas más importantes para el sector y con más repercusión económica del año». Por ello, anunció la presentación ante el TSJR de un recurso de solicitud de medidas cautelarísimas que «anulen las nuevas normas».

Desde Aragón, Alberto Campuzano, portavoz de las asociaciones de ocio nocturno en Zaragoza, confirma que este miércoles se han solicitado las medidas cautelarísimas, y trabajan también en una causa penal contra el Gobierno de la región. «Sentimos una verdadera puñalada por la espalda a 2-3 días de abrir», expone. Tras más de un año clausurados, ahora se muestran «incrédulos» ante una medida que limita la apertura de estos locales en Aragón hasta las 2.00 de la mañana. «No es posible abrir a las 0.30 para cerrar a las 2.00. Nos están quitando nuestro derecho a trabajo, sin posibilidad de hacer una facturación que ya tenemos comprometida», dice Campuzano. Recuerda este empresario que desde el sector se ha ofrecido al Ejecutivo regional diversas medidas mucho más estrictas, como reducir aforos o realizar cribados masivos, pero todas han sido desechadas. «No entiendo por qué sí puedo pasar la Nochevieja en un local de Madrid, de Soria o de Guadalajara y no en uno de Aragón», se lamenta Campuzano. Las pérdidas se cifran en torno a los 2 ó 3 millones de euros solo en esta región, en la que 800 puestos de trabajo corren peligro pese a tener ya vendidas 40.000 entradas para los cotillones.

Cierres a la una

En Navarra ayer se publicó la orden foral que, con el aval del Tribunal Superior de Justicia, impone nuevas restricciones. Hasta el próximo 14 de febrero los locales hosteleros tendrán que cerrar a la una de la madrugada y no podrán abrir antes de las seis de la mañana. Además, se prohíbe el consumo en barra y en las mesas no podrán sentarse agrupaciones de más de diez personas.

«Es curioso que aunque desde la consejería insistan en que no nos quieren criminalizar, en la orden solo se habla de restricciones a la hostelería, a ningún otro sector», se queja Nacho Calvo, secretario general de la Asociación de Hostelería de Navarra que cree que estas nuevas restricciones podrían ser «la puntilla» para muchos negocios de la comunidad. Explica que después de un otoño en el que parecía que empezaban a despegar, terminan el año afrontando «un mes horrible».

Los problemas empezaron con las cancelaciones de comidas y cenas de empresa. «Muchos asociados han estado tirando de ahorros», nos cuenta, pero las nuevas restricciones auguran un panorama muy complicado. «Un bar se basa en el consumo de pie», lamenta, y clausurar las barras implica reducir de facto el aforo máximo al 35% del habitual. A todo ello habría que añadir las pérdidas millonarias del ocio nocturno porque para estos empresarios la normativa implica un cierre total de locales durante tres semanas.

Son restricciones que Calvo no termina de explicarse, porque los locales hosteleros, dice, son «los únicos» que tienen regulado por normativa un sistema de ventilación. Cree además que la prohibición no va a contener las ganas de fiesta de los más jóvenes que ya están organizando botellones y fiestas en viviendas.

También lo creen los hosteleros del País Vasco, que ya han presentado en el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco un recurso en contra de las restricciones. «Pero por mucho que corramos, la Nochevieja ya está perdida», lamenta Héctos Sánchez, gerente de la Asociación de Hostelería de Vizcaya, que ve muy complicado que los jueces puedan resolver antes del viernes.

Y no solo la fiesta de fin de año, Luis Ángel Rodríguez, dueño de la sala Moma, una de las discotecas más grandes de Bilbao, ha tenido que cancelar tres fiestas más que había previstas todas estas noches. «Como el decreto se publicó inmediatamente, el mismo martes por la noche, con dos horas de antelación, tuvimos que llamar a muchos clientes para decirles que la fiesta de esa noche había que cancelarla», lamenta.

En su caso todavía no ha podido cuantificar las pérdidas pero serán de cientos de miles de euros, porque tenían todas las entradas vendidas y todo lo necesario ya comprado. «No es solo devolver las entradas, habíamos comprado decoración para Nochevieja, alfombras, globos…», explica. Y a ese gasto, que no podrán recuperar, hay que añadir el desembolso que ya habían hecho en comida y bebida. «Tengo dos almacenes llenos de material, casi el género que muevo en dos meses», añade Rodríguez.

Los hosteleros vascos creen que, además, el cierre del ocio nocturno no servirá para frenar las ganas de fiesta de los jóvenes. «En lugar de gente repartida en varios locales va a haber aglomeraciones en las calles», pronostica el empresario vasco. La cancelación también estaría provocando, según apuntan desde la Asociación de Hosteleros de Vizcaya, un incremento de los alquileres de pisos, locales o casas para celebrar fiestas la última noche del año. De hecho, Erne, el sindicato mayoritario de la Ertzaintza prevé que podría ser una «noche complicada» en la que fiestas y botellones deriven en incidentes y disturbios.