Alerta en Reino Unido por la ola migratoria: ¿Qué esta pasando en el canal de la Mancha?
Se han disparado las travesías migratorias desde las costas francesas, unas 31.500 personas han intentado cruzar este año el estrecho una cifra muy por encima a los 8.404 del año pasado
Desde el 2018 las travesías migratorias por el canal de la Mancha se han disparado con cifras récord como consecuencia de la proliferación de mafias que trafican con inmigrantes cerca del puerto de Calais, al norte de Francia. La esperanza de cientos de inmigrantes que intentan a diario cruzar el estrecho es la misma: llegar con vida a Inglaterra.
Hasta el 20 de noviembre, 31.500 migrantes habían intentadocruzar las engañosas aguas del mar del Norte y 7.800 de ellos fueron rescatados. Una cifra muy por encima de las 8.404 personas que lo hicieron en 2020. Aún peor es que la tendencia no parece disminuir pese a las temperaturas invernales.
¿Qué está pasando en el canal de la Mancha?
El Reino Unido está en estado de alerta por la ola migratoria en el canal de la Mancha.
El pasado 24 de noviembre, una treintena de inmigrantes, entre ellos tres menores y una mujer embarazada, se lanzaron al agua en pequeñas e inseguras embarcaciones de goma desde las costas francesas y ninguno resistió los embistes del mar.
Se registró como la peor tragedia ocurrida, pero no fue una sorpresa para el gobierno británico, que han visto como ha incrementado el cruce de los inmigrantes porque «los criminales que facilitan estos viajes están motivados por el interés propio y el lucro, no por la compasión», en palabras de la ministra británica de Interior, Priti Patel.
Antes de este naufragio, el balance desde enero era de tres muertos y cuatro desaparecidos, tras los seis muertos y tres desaparecidos en 2020.
¿Cuál es la posición de Francia?
Tras lo sucedido, el presidente Emmanuel Macron reaccionó y dijo que no va a permitir que el Canal «se transforme en un cementerio». Francia apela «a una mayor cooperación europea en este ámbito» y coincide con el primer ministro británico, Boris Johnson, en que es necesario hacer todo lo posible para combatir las mafias que operan en la zona.
Pero la parte británica afea a la gala que no impida la salida de pateras. El ministro del Interior francés, Gérald Darmanin, ha asegurado en declaraciones a la emisora RTL que Francia ha «salvado» este año a 7.800 personas de morir cruzando el agua.
¿Y qué opina el Reino Unido?
El gobierno de Boris Johnson quiere parar cuanto antes esta situación dramática en el Canal de la Mancha porque puede abrir las puertas a una crisis política en el país. Si los británicos pensaron que tras el Brexit se alejarían de la crisis migratoria que asola al resto de Europa, ya se han dado cuenta que los sigue golpeando de primera mano.
Johnson reiteró ayer jueves una propuesta de realizar patrullas conjuntas en las costas francesas del Canal de la Mancha donde la víspera murieron 31 inmigrantes. Pero fue rechazada por París cuyo presidente pidió no «instrumentalizar» la tragedia con fines políticos. En una conversación telefónica mantenida el miércoles por la noche, Johnson y Macron acordaron «intensificar sus esfuerzos» para hacer frente a las bandas de traficantes que organizan cruces ilegales.
¿Qué va a pasar ahora con la reunión pautada el domingo?
La tensión comienza a aumentar entre los dos países al Francia anular este viernes la participación del Reino Unido en una reunión el próximo domingo para abordar la crisis migratoria en el canal de la Mancha.
París justificó su decisión al considerar «pobre en contenido y totalmente inapropiada en la forma» la carta del primer ministro pidiéndole readmitir a los migrantes que alcanzan sus costas. En una carta hecha pública, Johnson pide a Macron «un acuerdo bilateral de readmisión (...) de todos los migrantes ilegales que crucen la Mancha», indicando que la Unión Europea (UE) tiene pactos similares con Rusia y Bielorrusia.
El encuentro se mantiene con responsables de migración de Francia, Bélgica, Holanda, Alemania y de la Comisión Europea.
¿Cómo es cruzar el Canal para un inmigrante?
Temblando y agotado en una playa de guijarros de la costa sur de Inglaterra, Ali, un sirio de 22 años, explica el alto precio que tuvo que pagar para cruzar clandestinamente el Canal de la Mancha junto a otros 30 migrantes. Este joven originario de Deir Ezzor, en el este de Siria, relata que pasó 12 horas en una pequeña embarcación neumática a la deriva entre Francia y el Reino Unido antes de que él y los demás, incluidos varios niños, fueran rescatados en alta mar por los socorristas británicos.
Ali y sus compañeros tuvieron que achicar el agua de su propia embarcación utilizando botellas de plástico. Afirma haber pagado 2.000 libras esterlinas (más de 2.600 dólares) a un pasador en Francia por una plaza en una embarcación más grande y fuerte que los pequeños botes masivamente utilizados en los últimos años.
Los cruces, que antes se limitaban a los calurosos meses de verano, se han extendido ahora a lo largo del año, en condiciones aún más difíciles. Tras haber sufrido varias horas el frío en el mar, Ali y sus compañeros fueron recibidos con mantas en Dungeness, donde la temperatura era de 5 grados. El viaje, que realizó en un pequeño bote navegando entre gigantescos petroleros y transbordadores lo dejó asustado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario