El 'milagro valenciano' o cómo controlar el coronavirus con las restricciones más duras de España
La Comunidad Valenciana roza el control de la pandemia tras dos meses de severas limitaciones que se prorrogarán hasta que pase la Semana Santa y la Pascua.
La Comunidad Valenciana alcanzó hace justo dos meses la mayor incidencia acumulada del coronavirus desde que comenzó la pandemia con cerca de 1.500 casos por cada 100.000 habitantes. Hoy, la región apenas registra una tasa de treinta contagiados, una de las más bajas del mundo y cien puntos inferior a la media del conjunto de España, de acuerdo con los últimos datos facilitados este miércoles por el Ministerio de Sanidad.
En la Generalitat Valenciana, no obstante, impera la cautela y se evitan los mensajes «triunfalistas». De hecho, la región sufrió especialmente los efectos de la tercera ola del Covid-19, cuando fue la autonomía con mayor tasa de letalidad y su sistema sanitaria rozó el colapso.
En dos meses, se ha pasado de una situación de riesgo extremo de propagación de la pandemia a rozar los veinticinco contagiados por cada 100.000 habitantes, el umbral que marcan las autoridades sanitarias para poder dar por controlado el coronavirus. En ese periodo, además, la tasa de positividad se ha reducido de forma drástica desde el treinta hasta algo más de tres por ciento de las personas que se somenten a pruebas PCR o test de antígenos para la detección del coronavirus.
Con todo, el repunte de casos en las autonomías vecinas y en el conjunto de la Unión Europea (este miércoles también ha subido ligeramente la incidencia del coronavirus en la Comunidad Valenciana tras 49 días de bajadas consecutivas) han propiciado que la Generalitat no baje la guardia y persevera en su receta ante el Covid-19, basada en las restricciones más duras de España.
De hecho, el Ejecutivo que preside Ximo Puig no ha esperado a la orden del Ministerio de Sanidad y ha aplicado ya las medidas para la Semana Santa, como el cierre perimetral de la Comunidad Valenciana y el toque de queda en la horquilla máxima que habilita el estado de alarma, entre las diez de la noche y las seis de las mañanas.
Además, la hostelería seguirá cerrando a las seis de la tarde y los comercios a las ocho. Todas estas limitaciones, que explican el «milagro valenciano» de contención de la pandemia, seguirán en vigor como mínimo hasta el próximo 12 de abril.
A la cola de España en PCR y test de antígenos
Por contra, la Comunidad Valenciana sigue a la cola en cuanto a la realización de pruebas para detectar el coronavirus. Una constante durante toda la pandemia que la Generalitat atribuye al carácter selectivo de las mismas y la capacidad para conocer la trazabilidad de los contagios. A día de hoy, la Generalitat realiza 666 pruebas por cada 100.000 habitantes, la tasa de PCR y test de antígenos más bja de España, frente a las 1.503 de media del conjunto del país.
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