TRABAJAR PARA LA PANTALLA

estoy muy desconcertado---

 

UNA FARSA PARECE

Un colectivo, según la RAE, es una agrupación de individuos unidos por lazos profesionales, laborales, etcétera, y "progresistas". Inocentemente creí que llevaría acoplado el término "progresistas", pero parece que no, que es una licencia gratuita y trivial.

Lo digo porque el presidente en funciones electorales, sin otras funciones, se ha reunido esta semana, y creo que continuará pues parece que no tiene otras cosas que hacer, con un buen número de colectivos cuyo denominador común es que son progresistas. Bueno, menos la patronal, donde pienso que hay progresistas y no progresistas.

La verdad es que un iluso como yo llegó a pensar que podría haber colectivos sin inclinación política, pero a la vista de los "elegidos y llamados" parece que no. También ignoraba que hubiese tantos y tan variopintos colectivos. No me extraña entonces que se necesite tanta inversión social: hay que comprar y mantener muchas voluntades. En Andalucía se están descubriendo "inversiones" a manos llenas en ciertos colectivos que forman parte del clientelismo electoral que tanto abunda en las izquierdas y que dará mucho trabajo a la justicia. ¡Eso esperamos!

Colectivos sociales y ONG; organizaciones feministas, ecologistas, educativas, turísticas; organizaciones sobre sanidad, sobre despoblación; sindicatos y asociaciones patronales. No podían faltar los colectivos culturales, escritores del régimen, artistas adiestrados, docentes por doquier, intelectuales adscritos y periodistas de confianza. Colectivos para dar y tomar y todos muy respetables. ¡Faltaría más!

He leído que el presidente en funciones electorales ha recibido a más de 150 colectivos. Parece ser que en cada encuentro participan entre quince y veinte personas y cada portavoz tiene tres minutos para hablar. Muy poco tiempo para tanta reivindicación pendiente. No me extraña que llegase tarde a la reunión con el jefe de Estado. También podría haber llegado a su hora, siendo respetuoso con el jefe de Estado, y recibir a los colectivos electorales pendientes en Doñana.

Desconozco si entre esos 150 se ha reunido con colectivos de funcionarios de prisiones, de la Guardia Civil y la Policía Nacional, de la enseñanza (pública y privada), de médicos y enfermeras, de jueces y fiscales, de militares y tantos otros que seguro tienen mucho que exponer al presidente en funciones.

¿Para qué sirve toda esta panoplia de ideas progresistas algo esperpéntica después de las falsas investiduras? Tiene únicamente un fin electoral, no hay otro. Alguien dice que quizá pretende hacer daño a Podemos o tal vez sirva para clamar indulgencia a Pablito. Lo que tengo muy claro es que esto no es gobernar un país. Y después de los mítines colectivistas, el presidente en funciones electorales se va de vacaciones, pero, ¡cuidadín!, dicen sus ministros que "permanecerá conectado". ¿Alguien es tan idiota que imagina a un presidente de Gobierno desconectado en sus vacaciones? Parece que sí los hay.