'Choupette', en una imagen publicada en su perfil de Instagram
‘Choupette’, la gata millonaria de Karl Lagerfeld
La 'it pet' más famosa de la moda gana tres millones de euros en un año por dos trabajos publicitarios.
Las excentricidades de Karl Lagerfeld son ampliamente conocidas, como conocida es su gata Choupette. Y es que resulta que la siamesa no solo es fuente de inspiración para el director creativo de Chanel, sino también la encargada de aumentar las cuentas bancarias del llamado káiser de la moda. Sí, Choupette ganó tres millones de euros por hacer dos pequeños trabajos: colaborar con la marca de cosméticos Shu Uemura y posar para el calendario de coches Vauxhall Corsa.
Quizá por eso Lagerfeld nunca ha escatimado en gastos en el cuidado de su mascota. La minina tiene dos niñeras, una cuenta de Instagram con más de 52.000 seguidores y en Twitter la siguen más de 46.000 personas, siempre viaja en primera clase y tiene su propio libro, Choupette: The Private life of a High-Flying Fashion Cat, de 128 páginas, en el que se detalla cuán consentida es. Pero lo que aún no se sabía era cuánto generaba la mascota del diseñador, hasta que el martes pasado en una entrevista con la revista The Cut el káiser lo reveló: “El año pasado facturó tres millones de euros solamente con dos trabajos”. Y añadió: “No permito que haga anuncios de comida y cosas por el estilo. Ella es demasiado sofisticada para hacer algo así”.
La gata, que ha ejercido de periodista en The Karl daily, ha sido modelo en campañas millonarias, tiene una colección de bolsos y accesorios, y ha sido portada de la edición alemana de Vogue junto a la mítica modelo de los noventa Linda Evangelista en 2013, llegó por azar del destino a manos del diseñador. “Choupette era de un amigo que me pidió que cuidara de ella mientras él se encontraba de viaje. Pero cuando regresó le dije que Choupette se quedaba conmigo. Ahora tiene otro gato que está muy gordo y Choupette se convirtió en la gata más famosa y rica del mundo”, comentó Lagerfeld.
Y sí que es rica. Cara Delevingne, la modelo más cotizada del momento, ganó en 2014 cuatro millones de euros, solo uno más que Choupette. Y es que con solo posar para el calendario de coches y ser la imagen de los cosméticos Shu Uemura, la minina ganó la mitad de dinero que Chiara Ferragni, la bloguera más rentable de la industria de la moda. Ferragni con su página web The Blonde Salad emplea a unas 14 personas y recibe unos 6,76 millones de euros anuales.
La gata más mimada del mundo también tiene carácter y personalidad. “Ella es como un ser humano, pero mejor. Sabe estar en silencio y no discute. Odia a los otros animales y a los niños”, confiesa Lagerfeld en la misma entrevista. “Ella es el centro de mi mundo. Hay algo inolvidable en ella. Su forma de moverse. Si la conocieran lo entenderían. Es sin lugar a dudas una inspiración para la elegancia”, puntualizó.
El fenómeno de los it-pets no es algo nuevo. Ya Paris Hilton se encargó de convertir en celebrities a sus chihuahuas, o Taylor Swift a sus gatos. Mientras que Cecil, el conejo de Cara Delevingne, tiene 97.000 seguidores en Instagram y Neville, el perro del diseñador Marc Jacobs, atesora 122.000 seguidores en la misma red social. Todos ellos, sin embargo, aún no generan ganancias para sus amos. Choupette quizá solo tiene un rival: Grumpy Cat. El gato que se hizo famoso por su malhumorado rostro gana alrededor de 100 millones de dólares por acuerdos comerciales.
VIVIMOS EN MUNDO DE VANIDAD TOTAL, CUANDO HAY MILLONES POBRES MURIENDO DE HAMBRE Y ENFERMEDADES,EXISTIENDO TANTAS PERSONAS QUE NO SABEN QUÉ HACER CON EL DINERO¿TIENEN CORAZÓN?¿VIVEN EN ESTE MUNDO?¿NO SE ENTERAN DE LA MISERIA IMPERANTE?¿SON HUMANOS?
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