Como ven, lo de Nacho Cano "duró lo que duran dos peces de hielo en un whisky on the rocks".
Se trataba de jugar sucio, no les salió del todo, eran becarios en formación, no trabajadores.
Es una política de fango (por todos los lados) la que acompaña a este Gobierno sanchista.
Antiguamente existían con algo parecido que se llamaba "aprendiz" gratis, aprendían oficios y profesiones; de ahí salieron trabajadores que lograron ganarse sueldos enormes, no como ahora, que solo hay salarios precarios y sin formación. No quieren trabajadores formados, quieren chachas baratas con derecho a propina, propina de turistas y propina institucional con salarios sociales, descaradamente en busca de estómagos agradecidos para el voto. Así ocurrió en Francia, donde en esos barrios de inmigrantes donde nadie votaba, en las últimas elecciones, por miedo a esa extrema derecha que jamás ha tenido posibilidades de mayoría absoluta para gobernar, con la política del miedo, miedo a que les expulsaran y aplicaran la repatriación a sus países de origen, lograron un montón de votos. Es política rastrera y miserable, que quiere pobres para darles de comer con nacionalidad incluida; de lo contrario, existiría una política de verdad en el tema de inmigración (que nada tiene que ver con la obligación de acoger refugiados, lo mezclan todo para manipular a la buena gente), donde vendrían los necesarios con derecho a trabajo, ya que tenerlos vagando por el País sin oficio ni beneficio, drogándose, delinquiendo (no les queda otra), en barrios marginales, es de mucha irresponsabilidad institucional total. No vale todo para mantenerse en el poder.
Al igual que pasó aquí, fueron capaces de dar impunidad a corruptos, delincuentes y fugados para tener su apoyo y aferrarse al poder. Esa izquierda no es mi izquierda. Es indecencia en toda ella.
Muy prestos esos medios y periodistas afines y activistas, se pusieron en marcha y en segundos muy compenetrados todos ellos, a la voz de su amo, sin contrastar nada, ejerciendo un periodismo mediático y destructor logrando desprestigiar a este gran músico que es historia real de nuestro país.
El mundo al revés: a quien triunfa y quiere ayudar, lo destruyen, esa es la igualdad que reivindican. Al inepto lo colocan a su lado para ser un relamido servidor.
Vienen libres los delincuentes, corruptos y fugados, al mismo tiempo que persiguen a jueces y medios incómodos. Esta política arribista e indecente es la de Sánchez. Vamos directos al abismo, pero la gente mira complaciente para otro lado en busca de esa ideología perdida, donde la palabra era firma, donde la promesa era cumplimiento, donde se jugaba democráticamente y limpio... la añoran, no existe, este PSOE no es socialista, es sanchismo, desengáñate, nada que ver, ya no queda nada de lo que pretenden defender ustedes. Aquí se está jugando sucio con vuestra colaboración. Son culpables, su candidez repercute en todos los demás, apoyan la indecencia.
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