Garzón, sobre la ganadería industrial: «Las transformaciones chocan con intereses del poder»
El ministro de Consumo mantiene que «vivimos en un modelo de producción y consumo insostenible»
Pese a la polémica que ha generado su batalla contra la ganadería industrial, el ministro de Consumo, Alberto Garzón, mantiene su postura. Es necesario transformar el modelo de producción y consumo porque «si no, lo que se ve amenazada es la vida», ha asegurado este miércoles, aunque a nivel práctico no es tan fácil. «Ahí hay siempre un problema, que es el poder», ha asegurado en la presentación de un informe sobre el consumo de carne. «Las transformaciones para adecuar el sistema económico y nuestro modelo de producción chocan y colapsan con los intereses de determinados poderes económicos y políticos».
Así se ha expresado durante la presentación del 'Atlas de la carne' de Amigos de la Tierra y la Fundación Heinrich-Böll, en donde el ministro también ha admitido que le ha sorprendido la polémica suscitada tras sus declaraciones al diario británico 'The Guardian'.
Las consecuencias, ha dicho, han sido positivas, ya que se ha acabado hablando sobre cómo se alimenta la sociedad y las consecuencias que tiene para la salud de las personas y del planeta.
«Vivimos en un modelo de producción y consumo insostenible», ha asegurado Garzón, quien ha defendido que tiene costes «ocultos» tanto para el medio ambiente como a nivel social, por lo que su ministerio trabaja para que la ciudadanía pueda «conectar» los productos del supermercado con su modelo de producción y sus consecuencias, ya sea el cambio climático, la contaminación o la pérdida de biodiversidad, entre otros.
«Es necesario reinstaurar una racionalidad ecológica que neutralice la crisis ecosocial. No es suficiente con que tengamos razón. Es necesario que articulemos política para transformar la realidad. Reconocer los límites del planeta para que los sistemas socioeconómicos se inserten dentro de tales límites es uno de los objetivos más acuantes de la especie humana», ha concluido.
Según el estudio elaborado por Amigos de la Tierra, el consumo global de carne se ha duplicado en los últimos veinte años hasta alcanzar las 320 millones de toneladas en 2018. Lejos de bajar la producción la investigación señala que su consumo crecerá un 13% en 2028.
Los últimos datos revelan que el 37% de las emisiones de gases de efecto invernadero a nivel mundial provienen del sistema agroalimentario y, de éstas, el 57% de las emisiones las ocasiona la industria cárnica. Esto se traduce en que hasta un 20% de las emisiones mundiales podrían atribuirse a la ganadería.
La investigación continúa ahondado en las cifras de deforestación y el uso de la tierra, con un 70% de las tierras agrícolas empleadas para alimentar al ganado, en concreto con un 40% de tierras a nivel mundial destinadas a la producción de pienso.
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