Los equipos negociadores del PP y Ciudadanos, este martes.
El PP y Ciudadanos limitan los casos que entienden como corrupción política para su pacto.
La medida de apartar a los imputados por corrupción se aplicaría solo en caso de enriquecimiento personal o financiación ilegal del partido.
El punto uno del pacto anticorrupción firmado ya entre el PP y Ciudadanos sigue dando problemas en la negociación entre ambas formaciones. El viernes, poco después de la firma, surgió la primera discrepancia sobre cuándo entra en vigor el compromiso de suspender a los cargos públicos imputados por corrupción. Y este martes ha surgido una duda: qué es corrupción. "No es lo mismo meter la pata, que meter la mano en la caja", ha afirmado el vicesecretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, para quien la corrupción política se circunscribe al "enriquecimiento personal" o la "financiación ilegal". "No se trata de hacer pasar por corrupción lo que no es. Tenemos la obligación de ser justos", ha apostillado el vicesecretario de Organización del PP, Fernando Martínez-Maillo.
Ambos partidos acotaron el concepto de "corrupción política" cuando se les preguntó por un nombre propio: Óscar Clavell, diputado del PP investigado por los presuntos delitos de malversación y prevaricación por la adjudicación de un contrato cuando era alcalde de La Vall d’Uixó (Castellón). "He hablado con él esta mañana y está dispuesto a dar todas las explicaciones y a dimitir si se abre juicio oral", ha insistido Maillo, para quien no se trata de un caso de corrupción política, sino de presunta "prevaricación administrativa por una denuncia política". Ciudadanos, por su parte, ha decidido recabar toda la información sobre el caso para decidir su posición. El asunto no se ha tratado en la reunión que han mantenido los equipos negociadores esta mañana, según Villegas.
Los equipos negociadores concluyeron a la una de la madrugada de este martes el documento con las 50 medidas de economía y empleo sobre las que ya están de acuerdo, como la implantación en España de la llamada mochila austriaca (un seguro para el trabajador a cargo de la empresa para cobrar en caso de despido o llegada la jubilación); y el compromiso de no subir el IRPF y bajar dicho impuesto en cuanto lo permita el cumplimiento del déficit. Esta tarde seguirán negociando, pero no se reunirán en el Congreso, sino que han quedado en intercambiarse documentos sobre los temas tratados durante la mañana sobre políticas sociales, ley de dependencia, violencia de género, sanidad y pensiones.
Para Ciudadanos persiste el desacuerdo en "cuestiones fundamentales". El número dos no ha querido hablar de líneas rojas, pero sí de "condiciones mínimas" para firmar el pacto, entre las que ha citado "alguna fórmula que luche contra la dualidad" laboral entre indefinidos y temporales, una reforma en el régimen fiscal de los autónomos, la "mejora igualación de los permisos de paternidad y maternidad", un "plan de emergencia social con un complemento salarial y lucha contra la pobreza infantil como elementos fundamentales", abordar las carencias de la dependencia y un acuerdo nacional por la educación.
Ambos partidos han insistido este martes en que se trata de un acuerdo a todo o nada; es decir, que deberán pactar todas las medidas en un acuerdo global o el resto no servirá de nada. "Somos moderadamente optimistas", ha afirmado Maillo. El PP y Ciudadanos han decidido aparcar hasta el final de la negociación los temas en los que ven más complicaciones para llegar a acuerdos, como el contrato único, las cuotas a los autónomos o la lucha contra el fraude. Mañana arranca uno de los bloques más delicados, el de la lucha contra la corrupción y la regeneración política. Ciudadanos quiere arrancar al PP el compromiso de celebrar primarias. Los populares han aparcado ese debate en sus propias filas a la espera de celebrar el congreso nacional del partido.
Como todos los días, el PP ha vuelto a dirigirse a los socialistas para pedirles que se abstengan en el debate de investidura. "Están pervirtiendo el concepto de abstención. Abstenerse no es apoyar", ha dicho el vicesecretario de Organización popular. "Hoy por hoy, el único partido que no propone nada para España es el PSOE. Hasta Podemos tiene una propuesta, la del Gobierno Frankenstein". Así es como llaman los populares a la lista de alianzas que harían falta para un Gobierno de izquierdas.
ESTO PARECE CORRUPCIÓN PERO NO LO ES, MEJOR LEGALIZARLA PARA QUE NO SEA ILEGAL
No hay comentarios:
Publicar un comentario