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miércoles, 27 de marzo de 2024

ASI ESTÁ LA SANIDAD PÚBLICA.

 CADA VEZ VA  A PEOR

Señores míos, si miran el calendario les dirá que estamos en 2024, pero este episodio que les voy a contar, real como la vida misma porque yo soy el protagonista, les hará dudar. Bien, el 7 de marzo me sentía fatal, con dolores en pecho, espalda, cuello... y muy cansado; y no encontraba justificación. El viernes por la mañana acudo a consulta en Policlínicas Begoña, donde me piden una analítica y una radiografía de tórax, y me apuntan para consulta en medicina interna cuatro días después. Saqué la radiografía entonces mismo y la analítica; el lunes, los resultados. Voy el mismo lunes con los resultados y me dan la baja y me recetan antibióticos; el martes, en medicina interna, me agregan prednisona, pero resulta sorprendente que ninguno de los dos médicos mira la radiografía, y el análisis refleja unos resultados compatibles con un infarto agudo de miocardio (esto lo supe después en el Hospital de Cabueñes). Como no veía mejoría, fui el viernes 15 al Hospital Begoña y allí se limitó la doctora de guardia a decir que estaba con un tratamiento y que siguiera con él; esta también vio el análisis. Pasadas unas horas, yo no podía respirar, ya no podía más, y volví al Hospital Begoña. Me atendió la misma y dijo que quizá se tratase de ansiedad lo mío. De repente, se le prendió una licencia en su cabeza y decidió hacerme un electrocardiograma. Aquí fue donde vio el grave problema. Como no tenían cardiólogo de urgencias (ni cardiólogo ni otra cosa a esas horas de madrugada), me deriva a Cabueñes y me dice que mejor en ambulancia, pero me dice que la ambulancia tardará hora y pico en recogerme

Yo decido ir a casa, que vivo a 150 metros, a que me lleven, y ella, para cubrirse, pone en el informe que me deriva en ambulancia pero que yo prefiero ir por mis medios; en ningún momento hace constar lo que me dijo de que la ambulancia tardaría más de una hora. Y yo les pregunto, señores lectores: ¿cuántos de ustedes esperarían por la ambulancia? ¡¡¡Ni que estuviésemos en el monte!!! Increíble. Si tienen urgencia grave de madrugada o fin de semana, NO vayan al Hospital Begoña, allí no podrá atenderles nadie, y si les han de derivar a Cabueñes u a otro hospital, ya lo saben, la ambulancia tardará más de una hora. Yo me encuentro ahora en Cabueñes y aún no sé qué secuelas arrastraré por la incompetencia de esta gente.

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