Según Sánchez y su Gobierno, España va como una moto, pero nos recomienda andar en bicicleta.
Solo observar el parque automovilístico español, que continúa envejeciendo y perdiendo calidad, al precio que están los coches y las gasolinas, con los salarios y empleos precarios que tiene la gente, la carestía de todo, más él engañando de estos, dirigiéndonos a comprar coches eléctricos que cuestan mucho más. ¿Quién puede comprar un coche ahora? Cuando hasta hace poco daban facilidades y descuentos para cambiarlo por temas de seguridad vial. Los coches nuevos que ahora se ven por nuestras carreteras son los que pueden comprar los españoles, son los más vendidos en países como Marruecos, Moldavia, Rumanía, Bulgaria y Bosnia. Ese es el nivel al que hemos crecido "para abajo" con Sánchez y cuadrilla. Hace pocos años estábamos cerca de países como Alemania, Francia, Suiza... Ahora Rumanía y Moldavia son nuestros referentes en automoción, pronto lo serán en el Estado de bienestar.
Este es el país de Pedro Sánchez, el país de la igualdad que tanto hablan. Cómo no lo vimos antes, la igualdad no puede existir jamás, solo sería posible si los excelentes, los buenos y los capaces bajan al nivel de los mediocres e incapaces.
Qué decir del vestido, las tiendas que priman ahora (nunca mejor expresado) son productos de precios adecuados a nuestra economía. Las boutiques de ropa de calidad van cerrando escaparates, abren en su lugar las de "low cost", la mayoría ropa fabricada en países donde no respetan las normas estrictas en seguridad laboral, DD HH, horarios, salarios... en una palabra, explotación total, que, como siempre, con esa demagogia e hipocresía que nos florece hasta por las orejas, nosotros las facilitamos al mismo tiempo que nos ponemos guapos, tiernos, puritanos y hermosos aquí con empleados y empleadores convirtiendo el entramado laboral en un imposible, solo ver y observar las calles de cualquier ciudad o villa, todo es negocios de todo tipo cerrados.
Vean la Sanidad pública, la cesta de la compra, la electricidad, la vivienda... Hablamos de las necesidades básicas de cada familia. Pues todo eso con Sánchez va a peor. Mientras, este sujeto mentiroso a más no poder va presumiendo de Falcon, perdonando deudas de despilfarro público (corrupción), regalando privilegios e impunidad a delincuentes y corruptos, despilfarrando en pinganillos en una estupidez sin límite, donde se prestan a ese juego todos ellos cuando tienen en común un mismo idioma. No me dirán que no es de gilipollas. Todo con nuestros impuestos.
En un erial convertirán España estos moralistas que pelean por la igualdad: la igualdad de todos a ras del fango.
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