EL DESAFIO.
En el último año, hemos presenciado avances significativos en la detección de ensayos generados por inteligencia artificial (IA). Si bien esto marca un progreso importante en la integridad académica, también es crucial reconocer que la evolución tecnológica es constante. La capacidad de detectar ensayos IA podría volverse obsoleta con el tiempo, ya que es probable que emerjan nuevas herramientas para eludir la detección de plagio. Es imperativo mantenernos a la vanguardia de estas innovaciones, desarrollando estrategias que no solo detecten el uso de IA, sino que también evolucionen con las tácticas futuras. La preservación de la honestidad académica requiere una adaptabilidad constante ante los desafíos tecnológicos emergentes.
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