¿Por qué Rusia se ha retirado de la isla de las Serpientes?
El ejército ruso se ha retirado de este importante islote que controlaba desde el pasado 24 de febrero, día en el que estalló la invasión de Rusia a Ucrania
La retirada de Rusia de un conclave tan estratégico como lo es la isla de las Serpientes podría ser una señal del futuro que le depara a Moscú en la guerra de Ucrania. Esta isla del Mar Negro fue ocupada por el ejército ruso durante el primer día de la invasión y, desde entonces, ha sido un importante punto para los soldados de Putin.
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Este islote, de apenas un kilómetro cuadrado de superficie, está situado a unos 48 kilómetros de la costa ucraniana y a unos 300 d Crimea, zona rusa desde 2014. Con los años, se ha convertido en una importante ruta de exportación de bienes agrícolas.
Sin embargo, su verdadero poder viene de la posibilidad que otorga para controlar el mar Negro occidental: aquel que mantenga la Isla de las Serpientes podría llevarse esta guerra.
Pero, si esta localidad es tan importante estratégicamente, ¿por qué Rusia ha decidido retirarse de la isla de las Serpientes en pleno enfrentamiento con Ucrania?
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Los motivos de Rusia para abandonar la isla de las Serpientes
El pasado 24 de febrero, la isla de las Serpientes fue tomada por el ejército ruso. Ahora, casi cuatro meses después, este islote vuelve a quedar libre tras el anuncio del Kremlin de su intención de retirarse de esta localización: «El 30 de junio, como medida de buena voluntad, las Fuerzas Armadas de la Federación Rusa completaron sus tareas asignadas en la isla Zmiiyiy y retiraron la guarnición estacionada allí», anunciaba el portavoz castrense, Ígor Konashénkov.
La intención, según afirman los propios rusos, es «demostrar a la comunidad internacional que Rusia no interfiere en los esfuerzos de la ONU para organizar un corredor humanitario para la exportación de productos agrícolas desde el territorio de Ucrania», facilitando así la vuelta del comercio al Mar Negro.
Sin embargo, los anuncios desde Ucrania son muy diferentes. De hecho, desde Kiev alegan que el adiós ruso viene motivado por los intensos ataques que han recibido los soldados de la isla en las últimas horas: "¡KABOOM! No quedan soldados rusos en la Isla de las Serpientes. Nuestras Fuerzas Armadas han hecho un gran trabajo", explicaba Andriy Yermak, jefe de gabinete del presidente Volodymyr Zelensky.
Por su parte, durante estos últimos días, Turquía ha tratado de elaborar un compromiso junto a Rusia y Ucrania para que estos faciliten la circulación de productos a través del Mar Negro. El objetivo es paliar los problemas de suministro que hay en alimentos y rebajar así la temida inflación que afecta a prácticamente todos los países a nivel internacional. Sin embargo, por su parte, Moscú llegó a asegurar que en ningún momento hubo un bloqueo naval y acusó a Ucrania de haberse cerrado sus propias vías.
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