El juez eleva a asesinato las imputaciones a los padres de la pequeña Asunta.
Se ha elevado la categoría del delito al existir agravantes de alevosía y parentesco.
El magistradoha ha prorrogado un mes más el secreto del sumario.
El juez José Antonio Vázquez Taín ha elevado a asesinato la imputación de los padres de la pequeña Asunta, Rosario Porto y Alfonso Basterra, al entender que existen los agravantes de alevosía y parentesco. El fiscal del caso ha solicitado también que se prorrogue un mes más el secreto de las actuaciones, petición que el magistrado del Juzgado de Instrucción número 2 de Santiago ha aceptado. Las defensas se opusieron al mantenimiento del secreto y han anunciado que volverán a recurrir esta decisión.
La diferencia entre el delito de asesinato y el de homicidio se centra en la premeditación de los acusados a la hora de perpetrar el crimen. El magistrado anunció el día que acusó a los padres que podría tomar esta decisión cuando tuviera los análisis realizados al cuerpo y las ropas de Asunta. Las pruebas toxicológicas realizadas al cadáver revelaron una cantidad letal de lorazepam, un ansiolítico cuya marca comercial más conocida es Orfidal. Según fuentes vinculadas al caso, los análisis arrojan un índice de 0,68 miligramos por litro de sangre (o lo que es lo mismo, 0,68 microgramos por mililitro) frente a la que, explican las mismas personas, se consideraría “normal” o fuera de riesgo para la salud: 0,04mg/l. Una cantidad 17 veces inferior.
El juez Taín ha reunido esta mañana a las partes personadas y a los dos acusados para poner en marcha el proceso legal previsto en un caso como este que va a ser dirimido por un jurado popular. Tras la vista tanto Taín como los imputados y sus abogados se desplazaron a la casa de la familiar de Rosario Porto situada en Teo, a las afueras de Santiago, para proceder a un nuevo registro de la vivienda orientado a recoger algunos objetos. La Guardia Civil sospecha que Asunta murió en esa vivienda. Tras pasar másde dos horas en la finca familiar, los acusados han regresado a la cárcel de Teixeiro (A Coruña). El abogado de la madre, José Luis Gutiérrez Aranguren, ha confirmado la nueva calificación de los hechos que se imputan a su defendida y ha asegurado que esta no colaborará "en ninguna reconstrucción". Los imputados no se podían negar a ir hasta la casa pero sí a participar en las diligencias que pretendían los investigadores como hicieron el pasado 4 de octubre.
La casa de Teo ya fue objeto de una inspección el domingo 22 de septiembre, tras ser hallado el cadáver de Asunta en una pista forestal ubicada a sólo unos cinco kilómetros de ese lugar. Posteriormente se realizó un registro en profundidad tres días después en el que estuvieron presentes los acusados. Tras siete horas de registro, fue cuando se decidió también la detención de Alfonso Basterra, ya que hasta ese momento solo estaba acusada la madre de la pequeña.
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Antes de empezar la vista, Aranguren ha puesto en duda la "imparcialidad” de un jurado popular para juzgar el crimen. El letrado ha dicho que el enjuiciamiento por la Ley del Jurado "era lo esperado", por ser el que corresponde al tipo de delito, pero "en estas circunstancias la imparcialidad va a ser imposible". Además, ha anticipado que pedirá nuevamente el excarcelamiento de su patrocinada puesto que para él la situación actual de Porto es de "detención ilegal". Aranguren ha contado que Porto "cada vez está peor, a medida que pasa el tiempo" y se ve que continúa en prisión, donde permanece desde el día 27.
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