LLORAN LOS TILOS
Oigo alma afligida el
lamento de tu llanto,
Por los inocentes
turistas que paseando,
En tarde placentera
de sol intenso,
Por la Rambla de
Barcelona,
Manos asesinas les arrebataron el encanto.
Por el niño feliz y
sonriente que distraído,
Chupando el delicioso, sabroso helado,
De la tierna mano del
abuelo fue arrebatado.
De la madre que
intentó salvar la vida de su hija,
Protegiendo la con su
cuerpo en esfuerzo desesperado.
Dragón de odio
herido, fuego es sus ojos,
Ciego de ira en
carrera mortífera,
Zigzagueante sembró de muerte y dolor,
La tranquila tarde de paseo de un mes de agosto.
Cual parca enfurecida
en concurso de muerte.
Siega cabezas cuantas más, mejor,
En arrebato desesperado
a golpe de reloj,
Rugidos de muerte,
gritos de desesperación,
Sangre sobre las
baldosas de gente inocente,
cinco de la tarde
dolor y muerte entre rosas y jardines.
Carreras y pavor en
el corso del infierno,
En una triste, my
triste y aciaga tarde de verano
Oh gran Solimán, tus
cobardes esbirros, han teñido
Tu media luna de rojo
de sangre inocente.
José Ángel Miyares
Valle
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