Foto-José Ángel Miyares Valle
HAY QUE MOVERSE.
El lunes me acerqué por la Plaza de Sol en Madrid y vi una manifestación con banderas sindicales de UGT y CCOO de unas 200 personas y le pregunté a los manifestantes para interesarme por el motivo y me dijeron que la empresa Vodafone querían echar a 1.250 trabajadores para contratar gente nueva, jóvenes preparados, dóciles y sumisos , con sueldos precarios y ¿qué iban hacer los padres de familia que tienen hijos con 45 o 50 años? ¿a dónde iban? La empresa tenía un saldo muy positivo, economía saneada, pingües beneficios y que quería más ganancias, como todas claro, y entre la nuevas tecnologías que traía reducción de plantilla y que seguían contratando jóvenes con bajos salarios y sin reconocimiento de antigüedad.
Pude observar como de
costumbre que en la manifestación no había jóvenes y me decía que los hijos no
se movían para defender el pan de padres y de ellos mismos, que estaban convencidos
de que su vida debía de ser de precariedad y que no tendrían ni jubilación y que
para qué se iban a manifestar y perder el
tiempo.
Pues bien ,este mantra
que llevo tiempo oyendo, me causa pavor, lo tienen muy asumido los jóvenes
actuales y no se mueven ni para ir a la cama. Con el móvil no se arregla todo ni
se ganan revoluciones hay que volver a las calles y hacer manifestaciones pues
de no hacerlo el empresariado acampa a sus anchas, pero comete al mismo tiempo
un error, que si bien se ahorra sueldos no va a la larga a tener consumidores y no
tendrá a quien vender sus productos, se reducirá drásticamente el consumo y el
mercado, a ver cuándo caen en la cuenta de este problema, no se puede incentivar
el consumo si no hay dinero, eso es así
de simple, tiene que haber salarios de trabajo o de subsistencia social ¿pero
lo suficiente para vivir dignamente. No es extraño ver a los jóvenes moverse
por la ecología, el animalismo todo muy loable, pero ¿el trabajo no es
importante, la subsistencia tampoco? ¿qué es lo que pasa, quién les ha
manipulado y quién les manipula?.
Vean ancianos en la
calle protestando por las pensiones, vean
trabajadores en las plazas defendiendo los puesto de trabajo y los jóvenes, nuestro
hijos y nietos, en las esquinas chateando
con el colega de al lado y o diciendo a la chica que tiene en frente que le
gusta , que le mola pero no son capaces de mirarse a los ojos o de priorizar las cosas importantes de la vida
y de su futuro y familia. ¿qué ha pasado para tener esta juventud tan poco
comprometida, algo hemos hecho muy mal indudablemente, no lo duden.
José Ángel Miyares Valle
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