MAS ES ABUCHEADO EN MADRID CON GRITOS DE TRAIDOR.

Mas, en el centro, abucheado y rodeado de pancartas a favor de la unidad de España.

Mas, recibido en Madrid con gritos de “traidor” y “separatistas, terroristas”.

El expresidente catalán participa en un debate con el exministro Margallo en el Ateneo.

Cuando Artur Mas aparece por la madrileña calle del Prado para participar en un debate con José Manuel García-Margallo, estalla un coro amenazante. "Gobierno, traidor, defiende a tu nación", gritan medio centenar de personas agrupadas a las puerta del Ateneo, donde tienen cita el expresidente de la Generalitat y el exministro de exteriores del último Gobierno de Mariano Rajoy. "Artur Mas, a prisión, por corrupto y por ladrón", chillan las personas que aguardan a Mas, identificados como falangistas por la pancarta que ellos mismos portan. "Separatistas, terroristas", braman rodeados de banderas de España.

La cincuentena de personas que la emprenden a gritos con el expresidente de la Generalitat de Cataluña se agrupan tras una pancarta en la que se lee una proclama contra el referéndum de autodeterminación que pide el político catalán: "La unidad de España ni se vota ni se negocia". Reparten panfletos mientras gritan sus consignas. Se dicen miembros del partido Alianza Nacional, que fue fundado en 2005 y se define como de extrema derecha.

Entre los manifestantes no son excepcionales las cabezas rapadas. Hay varias banderas españolas en las que se lee "¡Viva la unidad de España!". Y decenas de policías que vigilan que la situación no vaya a más entre los bolardos y los adoquines del Madrid de los Austrias: los antidisturbios tienen que llegar a emprenderla a empujones con los más exaltados de la protesta, que intentan superar el cordón policial para acercarse al expresidente de la Generalitat.

En ese ambiente entra Mas al Ateneo. Justo en el día en el que alega que se han vulnerado sus derechos constitucionales con la sentencia que le inhabilta durante dos años por su participación en el referéndum de 9-N, el expresidente catalán acude a la capital para defender una consulta vinculante y se le recibe con gritos, abucheos y amenazas.

AHORA DIRÁ QUE NO QUEREMOS A LOS CATALANES, PERO EL QUE SIEMBRA VIENTOS RECOGE TEMPESTADES,NO OBSTANTE HAY QUE RECONOCER LA VALENTIA PARA ACUDIR A MADRID A PECHO DESCUBIERTO,SE CONFUNDIÓ DE ESCENARIO TENIA QUE HABER TRAIDO EN AUTOBUSES EL SÉQUITO DE SEPARATISTAS PARA LUCIRSE ANTE LAS CÁMARAS COMO EN CATALUÑA.