martes, 28 de febrero de 2017

PUIGDEMONT QUIERE DECLARAR LA REPÚBLICA POR VIA DE URGENCIA

 Puigdemont quiere proclamar la república catalana por vía de urgencia.


Aplazada la modificación del reglamento del Parlament para aprobar sin debate la ley de desconexión.

La estrategia independentista para lograr la secesión ha dado este martes un nuevo paso con la presentación de un escrito de Junts pel Sí para modificar el reglamento del Parlament, de manera que se pueda aprobar la ley de desconexión esquivando toda la tramitación habitual y los controles legales y de la oposición.
Los letrados del Parlament y todos los grupos de la oposición (Ciudadanos, PSC, Catalunya sí que es Pot y el PP) han advertido del defecto formal y han logrado aplazar la cuestión una semana. Con todo, ya ha empezado la cuenta atrás para proclamar que “Cataluña se constituye en una república de derecho, democrática y social” que prevé el artículo primero de la llamada ley de transitoriedad jurídica pactada por Junts pel Sí y la CUP.
Los letrados del Parlament y todos los grupos de la oposición (Ciudadanos, PSC, Catalunya sí que es Pot y el PP) han advertido del defecto formal y han logrado aplazar la cuestión una semana. Con todo, ya ha empezado la cuenta atrás para proclamar que “Cataluña se constituye en una república de derecho, democrática y social” que prevé el artículo primero de la llamada ley de transitoriedad jurídica pactada por Junts pel Sí y la CUP.
Ese será el punto de no retorno del proceso independentista catalán, porque al amparo de esa ley se pretende convocar el referéndum sobre la independencia que el Tribunal Constitucional ya ha advertido que suspenderá. Para Junts pel Sí y la CUP se trata de un acto de soberanía que permitirá "el ejercicio del derecho de autodeterminación". En la práctica es la proclamación de la república catalana de la que habla el artículo primero de la ley de desconexión.
Para que pueda aprobarse esa ley de desconexión sin el control previo del Tribunal Constitucional ni el debate parlamentario es necesario que se tramite por el procedimiento de lectura única, reservado ahora a los proyectos de ley que presenta el Gobierno o a las proposiciones de ley si las firman todos los grupos de la oposición. Por eso, una de las enmiendas que recoge el texto de Junts pel Sí presentado ayer es que un grupo parlamentario pueda proponer una proposición de ley, que es lo que sucederá con la ley de desconexión.
Eso evitará, por ejemplo, esquivar el dictamen del Consejo de Garantías Estatutarias sobre su constitucionalidad o no y sobre si se adecua al Estatut.
Los grupos de la oposición han logrado esta mañana aplazar el inicio del procedimiento para reformar el Reglamento del Parlament que permitirá tramitar la llamada ley de desconexión. La cuestión polémica es que para iniciar esa reforma se ha de crear una ponencia conjunta, como sucedería en caso de que se quisiera modificar cualquier ley, y la petición de Junts pel Sí no recogía ese procedimiento. Los letrados de la Cámara han dado la razón a la oposición y la Mesa ha decidido finalmente realizar una admisión condicionada de la propuesta de Junts pel Sí. En la práctica, eso supone aplazar el tema.
El objetivo último de la operación impulsada por Junts pel Sí es que sea el Parlament y no el Gobierno catalán el impulsor del referéndum. Con ello aspiran a evitar, o como mínimo a retrasar, posibles proceso de inhabilitación del ejecutivo de Carles Puigdemont. Además, buscan que la tramitación de la ley que debe amparar el referéndum se haga sin el debate político y ciudadano que siempre han prometido. Con este secretismo también buscan burlar las impugnaciones del Tribunal Constitucional.
La solución llegará la semana que viene, con la probable convocatoria de una junta de portavoces extraordinaria en la que Junts pel Sí razonará de otra manera su petición para modificar el reglamento. A partir de ahí se creará la ponencia conjunta en la que la mayoría independentista de Junts pel Sí y la CUP tendrán mayoría absoluta.
Los trabajos de esa ponencia, por tanto, podrán ser breves si se aplica el rodillo parlamentario. La última reforma del Reglamento del Parlament se aprobó después de una sola reunión de la ponencia. Por tanto, parece claro que la reforma estará lista con creces para antes del verano.
Será el primer paso para aprobar la proposición de ley de desconexión que ya han pactado Junts pel Sí y la CUP y que se haría en lectura única, según prevé la reforma del Reglamento que ya habrá prosperado. Sobre la base de este texto, los independentistas prevén convocar un referéndum unilateral de independencia. La lectura única está reservada ahora a los proyectos de ley que presenta el Gobierno, pues se trata de un procedimiento extraordinario.
La clave de la estrategia de Junts pel Sí y la CUP pasa por aprobar la ley de desconexión por el procedimiento de lectura única en un Pleno en el que se modificará sobre la marcha el orden del día para incorporar ese punto, como ya sucedió con las conclusiones de la comisión del proceso constituyente.
Alejandro Fernández, portavoz parlamentario del PP, ha calificado a Junts pel Sí de "trileros políticos" y ha recordado que varios grupos de la oposición ya acudieron al Tribunal Constitucional por vulneración de derechos de los diputados y se les dio la razón. "Lo que ha pasado hoy es un "esperpento surrealista", ha añadido Fernández.
Por su parte, Fernando de Páramo (Ciudadanos) ha considerado lo ocurrido como "un nuevo espectáculo de la Junta de portavoces y de la Mesa". En su opinión, Junts pel Sí y la CUP "hacen trampas y quieren un reglamento a medida para poder hacer lo que quieran con el Parlament".
Ferran Pedret (PSC) ha remarcado que Junts pel Sí ha empleado un "procedimiento inadecuado" y ha explicado que no era necesaria una reforma del Reglamento para "impulsar cambios legislativos exprés". David Pérez, también diputado socialista y miembro de la Mesa, ha ido más allá. "Lo que está haciendo Junts pel Sí me parece intolerable, es un atropello. Se están cruzando todas las líneas rojas y hay que empezar a decirlo claro", ha asegurado.
Joan Coscubiela (Catalunya sí que es Pot) se ha sumado a la crítica a la actuación de Junts pel Sí. "Cada vez que con una astucia pretenden engañar al Estado, lo que hacen de verdad es sustraer el debate a la ciudadanía y degradar el Parlament", ha dicho el diputado.
Por contra, el adjunto al portavoz de Junts pel Sí, Roger Torrent, ha defendido la propuesta de modificación impulsada por su grupo. "Es una reforma que amplía los derechos de los grupos parlamentarios y es sorprendente que se muestren en contra", ha dicho. En su opinión, la reforma beneficiará a todos los grupos.
SI AHORA DECLARARAN LA REPÚBLICA UNILATERALMENTE NO PASARÍA NADA PORQUE EL GOBIERNO NO TIENE PODER PARA SOMETERLES,PERO ME TEMO QUE SON AMENAZAS PARA SACAR DINERO Y SI QUISIERAN DE VERDAD LA REPÚBLICA YA  LA PODIAN TENER, PERO NO ES ASI.

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