sábado, 3 de octubre de 2015

TALLERES QUE QUITABAN EL FILTRO ANTIPARTÍCULAS

Foto: Pruebas de las emisiones de motores diésel. (EFE)

Descubierta una red de talleres que quitaba el filtro antipartícula a los coches diésel

Los mecánicos cobraban entre 100 y 200 euros por retirar los filtros antipartículas (FAP), cuyo recambio para pasar la ITV tiene un coste de 1.200 euros.
La Policía Nacional, bajo la dirección de la Fiscalía Coordinadora de Medio Ambiente y Urbanismo, ha imputado a los responsables de ocho talleres mecánicos de la Comunidad de Madrid por realizar operaciones de retirada del Filtro Antipartículas de Vehículos diésel (FAP), para evitar repararlo, y modificar su software con el fin de encubrirlo.
Según explican desde la Dirección General de la Policía, el objetivo de esta práctica era ahorrarse el coste de reparar la pieza (cobraban a sus clientes entre 100 y 200 euros, en lugar de los 1.200 euros que cuesta habitualmente reparar el FAP), al tiempo que se obtenía un incremento de potencia de los vehículos diésel. Sin embargo, la consecuencia de la retirada del FAP es que el vehículo expulse los gases del motor directamente al exterior (sin pasar por el filtro), provocando así un "grave perjuicio al medio ambiente", indican.
Motor diésel trucado. (Policía Nacional)
Motor diésel trucado

"Con la reprogramación del software de la centralita conseguían que las emisiones nocivas fueran indetectables en las ITV, e incluso por los propios servicios oficiales de las marcas", detalla la Policía en un comunicado. "Todas estas alteraciones se ofertaban abiertamente en internet e incluso en algunos casos en los mismos establecimientos en que se llevaba a cabo", agrega.
La práctica, que consistía en la "anulación electrónica y el vaciado mecánico de los filtros antipartículas de vehículos diésel", ha sido detectada gracias a la denuncia de un cliente ante la Fiscalía de Medio Ambiente de Madrid. A partir de ese aviso, las pesquisas llevadas a cabo detectaron que algunos de los establecimientos estaban especializados únicamente en la manipulación del software de los vehículos, mientras que remitían a otros talleres para la perforación o retirada del FAP
Además, estos establecimientos recibían peticiones de talleres de diferentes puntos de España, por lo que la Policía ha recabado datos de otros 80 talleres en otras comunidades en los que podría estar llevándose a cabo esta práctica, según ha indicado el cuerpo.
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