CC OO de banca gastó 14 millones en viajes y reuniones en cinco años
Los dirigentes desembolsaron decenas de miles de euros en asadores y marisquerías.
Comfia, la antigua federación de banca de CC OO —hoy fusionada con la de comercio y hostelería— gastó entre 2008 y 2012 un total de 14,06 millones de euros en “viajes y reuniones”, según recogen las cuentas internas del sindicato, a las que ha tenido acceso EL PAÍS. Esta partida es, tras la de “gastos generales” —14,99 millones—, la mayor entre las salidas de dinero en los años estudiados.
Las decenas de miles de apuntes contables de viajes y reuniones reflejan unos gastos muy elevados en toda la estructura de la federación. Entre ellos, además de los previsibles desembolsos del mayor sindicato del sector financiero —transporte, dietas, hoteles...—, destacan dos partidas en particular. La primera son las decenas de miles de euros anuales gastados por la cúpula estatal en asadores, marisquerías y restaurantes de elevado precio. La segunda es la millonaria factura que suponen los frecuentes congresos y reuniones a todos los niveles —estatal, comunidades, empresas...—, con eventos que llegan a costar más 300.000 euros. A ellos hay que sumar gran cantidad de apuntes por cientos o miles de euros registrados bajo términos genéricos —“varios”, “visa”...— que hacen imposible comprobar el destino real del dinero.
por todo el territorio”, explica Benito Gutiérrez, secretario de Organización y Finanzas de la organización. “Visitamos todas las oficinas de España dos o tres veces al año, y son varios miles. Esto supone muchos gastos de transporte, alojamiento, alimentación...”. El sindicato admite que ha adoptado medidas de ahorro con la aplicación de nuevas tecnologías. Esto, por ejemplo, ha permitido reducir los gastos de viajes y reuniones registrados entre 2008 y 2012 —de 2,7 a 2,9 millones de euros anuales— a dos millones en 2013.
Las cuentas de Comfia revelan una gran cantidad de comidas, a veces tres veces por semana por dirigente, en restaurantes que superan los 50 euros por comensal. Entre los locales hay asadores de Madrid como Dantxari, Kupela y Cuevas del Duque; sidrerías como Zerain; arrocerías como Zaranda y La Buganvilla; y locales como El Zorzal, Treze, Casa Jacinto y Parrilla De María, entre muchos otros. Cuando visitaban Barcelona, los locales a los que acudían eran el 7 Portes, el Senyor Parellada y el Merendero de la Mari. Los recibos de varios cientos o más de 1.000 euros se acumulan en la contabilidad del sindicato.
Un caso destacado es el del Benito Gutiérrez. En 2009, gastó 37.057 euros en viajes, de los que 15.810 fueron en restaurantes y otros 7.200, en apuntes genéricos como “varios” y “acción sindical”. Otro caso es el de José María Martínez López, secretario general de Comfia, cuyos gastos ese mismo año ascienden a 26.719 euros. En este caso es más difícil saber el motivo del gasto, ya que 14.846 euros figuran bajo apuntes genéricos. Los que concretan el gasto en restaurantes ascienden a 7.785 euros. Para ambos dirigentes, el sindicato también pagaba sobresueldos de hasta 20.000 euros anuales, el renting de un coche (unos 10.000 euros anuales), el alquiler de una plaza de garaje (2.000 euros al año), y en el caso de Gutiérrez, que tiene su domicilio en Mora (Toledo), un piso en Madrid (12.000 euros al año).
Los congresos, reuniones y juntas generales de accionistas son otra de las grandes partidas en las cuentas. El congreso celebrado en la primavera de 2009 en Sevilla, por ejemplo, ocasionó a la estructura estatal un gasto superior a los 300.000 euros si se agrupan todas las partidas. “La convocatoria obliga a desplazar a 600 personas, alojarlas en un hotel, comidas... Puede parecer un gasto elevado, pero a ello nos obligan los estatutos”, defiende Gutiérrez.
Del nivel de gasto de Comfia da una idea el hecho de que a los congresos, celebrados cada cuatro años, hay que sumar las decenas de reuniones que anualmente convocan federaciones autonómicas y secciones de cada entidad financiera. Cada una costó a Comfia desde poco más de un millar de euros por una reunión a cerca de 20.000 una jornada.
Las cuentas también incluyen algunos gastos llamativos, como la multa de tráfico de 250 euros impuesta al secretario de Madrid, Francisco López, y pagada por Comfia el 13 julio de 2010. “No debería haberse pagado”, admite el sindicato. El mismo López y Félix Benito cargaron sendos recibos —de 28,3 y 33,9 euros, respectivamente— por la “huelga general del 29-S” de 2010. Comfia afirma que se trata del “parking de la jornada, cuando pusieron su coche a disposición de la organización”. En las cuentas de Manuel Rodríguez Aporta, responsable de cooperación internacional, consta en 2008 un apunte por 509,5 euros de la agencia peruana Inkanatura Travel, especializada en el ecoturismo y expediciones a la selva amazónica y al Machu Picchu. Un portavoz de Comfia asegura que “Rodríguez estaba en Perú formando a sindicalistas locales, y el gasto debe corresponder al alquiler de algún espacio para reuniones”. La página web de la agencia no ofrece este servicio.
El polémico triángulo de Caja Madrid
El restaurante El Zorzal y las sedes de Comfia y Caja Madrid formaron un triángulo en el que se movieron muchos hilos que acabaron enredándose en la quiebra de la entidad. En las cuentas de la federación —que tiene varios cuadros procedentes de la caja madrileña—, figuran decenas de miles de euros gastados en este local, propiedad de dos exdirectivos de Comfia: María Jesús Paredes y Francisco Baquero. Este tuvo que dejar sus cargos en CC OO tras saberse que gastó como consejero de Caja Madrid 266.400 euros con las tarjetas black.De ellos, 14.163 los gastó en su propio restaurante. Baquero fue uno de los seis miembros de CC OO que usaron tarjetas opacas de la entidad.
El expresidente de Caja Madrid Miguel Blesa, hoy imputado, tuvo en Comfia a uno de sus principales apoyos. En la asamblea celebrada en enero de 2010, meses antes de la primera aportación de fondos públicos a la entidad, el actual secretario general de Comfia, José María Martínez, despidió a Blesa —relevado por Rodrigo Rato— con las siguientes palabras: “Queremos expresar nuestro reconocimiento por su gestión durante los últimos 13 años, que también han sido la etapa más fructífera desde el punto de vista laboral”.
Ayer, tras publicar EL PAÍS que Comfia repartió 3,7 millones en sobresueldos a sus delegados, el sindicato emitió un comunicado en el que insiste en la transparencia de los pagos, a los que llama “retribuciones de carácter complementario”. La nota omite que nunca ha hecho pública la cuantía total de los pagos, las personas que los perciben ni los abonos por delegado.
COMENTARIO:
Todos a la cárcel ya.Vaya con los "compañeros del metal". Ah, claro que son los de la banca. Entonces no es extraño que estén el línea con los Blesa, Rato, Barcoj, etc... Hay que demostrar que se es de clase alta, aunque sea trabajadora. Nada de bocata de sardinas y botellines, nooooo. A los congresos hay que ir bien comido y bien dormido, por eso los "compañeros" comían y dormían como mínimo en cinco estrellas . Lo único "positivo" es que se va alcanzando la igualdad de clase en la corrupción. Ya no solo son corruptos políticos y empresarios, también los representantes de la clase obrera han ido espabilando. Recuerdo los últimos años de la dictadura y principio de la transición, cuando el sindicalismo hervía eufórico de buenos deseos de libertades y justicia social, cuántos sindicalistas subidos a unas maderas en cualquier lugar arengaban a los trabajadores con mítines que dejarían a la derecha al mismísimo Karl Marx. Hoy “casta”, “empresa de colocación”, “aceptación del estatus”, “aburguesamiento”, “todo por la pasta gansa”, políticos al fin y al cabo tal como sus “primos” políticos, ¿todos?, no, pero eso no les exime de crítica colectiva de su alejamiento de los verdaderos objetivos de su función. Los partidos políticos y sindicatos que nos han traído hasta aquí, no merecerían otra cosa que el castigo de las urnas, regeneración o desaparición. Los miedos a los cambios y los barrigas agradecidas que han cuidado sean muchos lo impedirán
No hay comentarios:
Publicar un comentario