UCRANIA ES INVADIDA BAJO LA APARIENCIA DE AYUDA HUMANITARIA

El convoy ruso con ayuda humanitaria entra en Ucrania

La OTAN acusa a Rusia de usar su artillería contra las tropas de Kiev

El convoy de ayuda humanitaria rusa entra en Ucrania sin autorización ni escolta.

El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, ha afirmado este viernes que la Alianza Atlántica ha observado "desde mediados de agosto" la transferencia de grandes cantidades de armas, tanques, artillería y vehículos blindados a las milicias prorrusas que combaten contra el Ejército ucranio en el este del país. En el mismo comunicado, el máximo responsable de la OTAN ha subrayado que el armamento de Moscú está siendo empleado contra los militares ucranios y se ha mostrado "alarmado" por la acumulación de fuerzas aéreas y terrestres rusas en los aledaños de la frontera entre ambos países.

Rasmussen ha señalado que, en vez de rebajar la tensión, el Kremlin está "contribuyendo" a incrementarla, a pesar de los esfuerzos del resto de actores de la comunidad internacional. "Esto solo puede conducir a un mayor aislamiento de Rusia". El jefe de la OTAN también ha instado a Rusia a no emprender "más acciones provocadoras" y ha condenado la "violación flagrante" de los compromisos internacionales que supone la entrada del denominado convoy humanitario de ayuda rusa en Ucrania, sin autorización y sin escolta. A su juicio, estos hechos solo pueden "profundizar" una crisis que "la propia Rusia ha creado y sigue alimentando".

Lo retrasos artificiales para comenzar la entrega de la ayuda humanitaria rusa a las regiones del sureste de Ucrania son intolerables

Ministerio de Exteriores ruso

Una portavoz de la alianza militar ha aclarado que, desde mediados de agosto, la OTAN dispone de "múltiples informes" sobre la "implicación directa" de fuerzas aéreas rusas y de unidades de intervención especial en operaciones en el este de Ucrania. "El apoyo de la artillería rusa —tanto desde Rusia como desde dentro de Ucrania— se está empleando contra las fuerzas armadas ucranias", ha añadido. Esta misma fuente subraya que esta acción se une a la reciente acumulación de efectivos rusos de tierra y aire en las proximidades del paso fronterizo. A principios de mes la OTAN advirtió de que Moscú disponía de 20.000 soldados en las regiones orientales del país.

Por su parte, EE UU ha advertido de "acciones adicionales" contra Rusia si no retira el convoy de camiones, teóricamente cargados con ayuda humanitaria, enviado a Ucrania. El Pentágono ha calificado de "entrada no autorizada" la llegada de los vehículos rusos y ha destacado que las autoridades estadounidenses están evaluando la situación con sus socios internacionales, en referencia a la UE.

Tras varios días de espera en la frontera, los primeros camiones del convoy de ayuda humanitaria rusa llegaron poco antes de las cinco de la tarde de hoy (una menos en la Península) a la localidad de Lugansk, bastión prorruso cercado por el Ejército ucranio, según informaron medios rusos. Cansado de los obstáculos que ponía Kiev, el Kremlin ordenó unilateralmente el cruce, a pesar de que los aduaneros no se presentaron para formalizar los preceptivos trámites. Los 262 furgones —de los que sólo 34 fueron inspeccionados por los aduaneros ucranios— atravesaron el paso de Izvarino para dirigirse a Lugansk vía Krasnodon.

"La parte rusa ha decidido actuar. Nuestra columna con carga humanitaria empieza a dirigirse hacia Lugansk", anunciaba en la mañana del viernes el Ministerio de Exteriores ruso, que acusaba a las autoridades ucranias de dar largas intencionadamente a los procedimientos aduaneros y subrayaba que "la situación con los interminables retrasos artificiales para comenzar la entrega de la ayuda humanitaria rusa a las regiones del sureste de Ucrania es intolerable". La Cruz Roja, que estaba previsto que escoltara los furgones, anunció que sus funcionarios no acompañan el cargamento ruso debido "a la inestable situación" y a la falta de "garantías suficientes de seguridad por parte de las fuerzas en conflicto".

La UE ha condenado la decisión de Rusia de acceder en Ucrania sin escolta de la Cruz Roja y sin el consentimiento del Gobierno de Kiev. "Se trata de una violación de la frontera y va contra los acuerdos previos alcanzados entre Ucrania, Rusia y la Cruz Roja. Instamos a Rusia a revertir su decisión", declara un portavoz de la Comisión.

El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, dijo poco después de la declaración de Exteriores que el presidente Vladímir Putin estaba "al corriente" de que la columna de camiones con alimentos destinados a aliviar la desesperada situación de los habitantes de las ciudades bloqueadas había emprendido rumbo hacia Lugansk.

"El 22 de agosto, Rusia, ignorando tanto las normas internacionales establecidas, como los precedimientos y los acuerdos alcanzados, sin visto bueno y sin acompañamiento del Comité de la Cruz Roja Internacional comenzó el ingreso ilegal de la carga humanitaria en territorio de Ucrania", se dice en la declaración que divulgó la Cancillería de Kiev.

Para el presidente de Ucrania, Petró Poroshenko, se trata de una "flagrante violación" de las leyes internacionales, un término que también ha utilizado el Ministerio de Exteriores ucranio. El Ministerio ha pedido a la comunidad internacional que se "una" para "condenar de forma decisiva estas acciones agresivas e ilegales".

El jefe del Servicio de Seguridad (SBU), Valentin Nalivaychenko, ha ido más allá y ha hablado de "invasión directa" por parte de Rusia. Tanto Nalivaychenko como el Gobierno han negado, sin embargo, que se planteasen bloquear el avance del convoy ya que consideran que habría sido una "provocación" que podría haber empeorado el conflicto.

Ucrania considera que el ingreso del convoy en su territorio demuestra "el carácter premeditado y agresivo de las acciones rusas". Kiev advierte que "toda la responsabilidad por la seguridad del cargamento recae sobre la parte rusa" y que "la ruta que ha tomado el convoy es blanco del fuego" de los rebeldes. Los ucranios llaman "a todos los socios internacionales a unirse a la decidida condena de las acciones ilegales y agresivas de la Federación Rusa".

En el campo de batalla, los separatistas derribaron un helicóptero Mi-24, anunció el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional y Defensa ucranio, Andréi Lisenko, quien agregó que la tripulación había muerto. El hecho ocurrió el miércoles cerca del poblado Gueórguievka en la provincia de Lugansk y Lisenko explicó que no habían informado antes del incidente para tener la posibilidad de organizar una operación de búsqueda para recobrar los cuerpos de los pilotos.

Las fuerzas gubernamentales continúan atacando los bastiones rebeldes en el este de Ucrania. La artillería bombardeó tres barrios de Donetsk en la mañana del viernes, según el ayuntamiento local. Lugansk continúa sin luz ni comunicación, mientras los proyectiles siguen explotando en el centro de la ciudad, causando nuevos daños, informan las autoridades municipales. Los habitantes no reciben ni los suelos ni las pensiones y sufren la escasez de alimentos, medicinas y combustible.

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