No tenía un duro», es la versión que desde el principio mantienen personas del círculo más íntimo de Rosario Porto. Pese a que en su casa los agentes se incautaron de unos 20.000 euros en metálico durante uno de los registros, la madre de la pequeña Asunta (en prisión por el presunto asesinato de la niña ocurrido el pasado 22 de septiembre) habría asegurado tener problemas económicos en más de una ocasión. Heredera universal de su padre, fallecido en 2012, tuvo que pagar importantes cantidades derivadas de las plusvalías de los inmuebles. Se sabe que tenía la casa de Teo (cercana a la pista forestal donde fue hallado el cadáver de su hija) en venta. Las indicaciones a la inmobiliaria eran no bajar del millón de euros.
En exclusiva, esta mañana el programa de AR, mostraba un requerimiento del Ayuntamiento de Santiago, por importe de 1.386,25 euros. La deuda que corresponde al piso de General Pardiñas en el que residieron durante 41 años sus padres no se pagó en fecha por lo que suma un recargó el 5% e incluye a Porto en la lista de morosos. Ahora la abogada tendrá cuatro días, hasta el próximo 11 de noviembre para satisfacer la deuda.
Este hecho abre de nuevo la tesis de que estaría atravesando problemas económicos y daría credibilidad a los testimonios que afirmaron que este extremo habría sido reconocido por la madre de Asunta en varias ocasiones. En el inmueble al que hace referencia el requerimiento, Porto había iniciado la reforma de la cocina que tuvo que parar. El motivo, podría ser la falta de liquidez.
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