YO NO CREO EN LA MAYORÍA DE LOS POLÍCOS MIIENTEN COMO BELLACOS NO HAY ÉTICA NI HONRADEZ

Los dos exsecretarios generales que hoy han comparecido ante el juez Ruz en la Audiencia Nacional han negado haber cobrado sobresueldos del partido en dinero negro y tampoco les consta que el PP haya recibido donaciones anónimas por parte de empresarios contratistas. Francisco Álvarez Cascos y Javier Arenas han coincidido en que desde la secretaría general no se estableció ningún protocolo para anotar las donaciones anónimas que recibían de empresarios. Esa responsabilidad, coincidieron las dos declaraciones, “correspondía al gerente o al tesorero”. Ambos acusaron a Álvaro Lapuerta del descontrol de las donaciones

Fuentes presentes en la sala han reconocido a El Confidencial que tanto Arenas como Cascos han negado “cualquier apunte recibido y entregado en los papeles de Bárcenas”. Los dos han asegurado en el alto tribunal que todo el dinero que han recibido del partido es el que aparece en sendas declaraciones de la renta. Las mismas fuentes insisten en que los dos testigos se han refugiado en la “ausencia de memoria” para evitar responder a las preguntas más escabrosas.

Javier Arenas, que reconoció al magistrado que le unió una gran amistad durante años con Luis Bárcenas, ha reconocido a Ruz la reunión celebrada en marzo de 2010 en Génova, en la que estuvo presente Rajoy, Arenas, Bárcenas y la esposa de este último, Rosalía Iglesias, en la que supuestamente el extesorero pidió que se dijera a Cospedal que dejara de intoxicar sobre él en la prensa. Sin embargo, Arenas ha alegado que “no recuerda nada” de lo que se habló en aquella visita. Sólo que hablaron de que Bárcenas mantuviera el coche oficial a cargo del partido, no que se le mantuviera el salario. “Bajo ningún concepto yo soy intermediario de nada”, sentenció Arenas.

El juez Ruz ha permitido que Francisco Álvarez Cascos no respondiese a los supuestos pagos en B que el PP recibió cuando él era ministro. Lo único que reconoció ante el magistrado es que él compatibilizó la secretaría general con la tesorería entre 1990 y 1993. Pese a ello, no ha conseguido recordar si en aquella época hubo entregas en mano de dinero negro de donantes anónimos a cambio de recibir obras públicas.

El único testigo que ha reconocido los dos apuntes contables ha sido Cristóbal Páez, número dos' de Bárcenas en la tesorería del PP, el sustituto del mismo cuando la trama Gürtel le obligó a apartarse de la formación.

COMMENTARIO:NO SE PUEDE SEGUIR CONFIANDO EN LA MENTIRA DE LOS POLÍTICOS Y EN UNA JUSTICIA QUE TODO LE VALE PARA SALIR DEL PASO. QUE DEVUELVAN TODO LO ROBADO Y QUE PAGUEN POR METER LA MANO EN EL CAJÓN DE LOS CIUDADANOS.