miércoles, 5 de junio de 2013

CRECE LA PREOCUPACIÓN DE LOS ESPAÑOLES POR EL PARO Y LA CORRUPCIÓN

Ocho de cada diez españoles señalan el desempleo como su principal inquietud, seguido de los problemas económicos.
Crece la preocupación por el paro y la corrupción pasa de la segunda a la tercera posición. El barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) del mes de mayo refleja un cambio de tendencia en la opinión pública respecto a las prácticas corruptas. Si en el mes de marzo la corrupción y el fraude alcanzaron el máximo histórico del 44.5%, en mayo la cifra cae al 30,7%. Sigue así la tendencia a la baja, después de que en abril el porcentaje fuera del 39,3. [Consulta el barómetro del CIS de mayo (PDF)]
Los dos principales problemas señalados por los encuestados tienen que ver con la economía. Así, el 82,4% cita el paro y el 34,9% los problemas de índole económica, que aparece en segunda posición. Ambas magnitudes, sumadas, reflejan un incremento de poco más de un punto respecto al mes anterior. En esa línea, el 41,9% piensa que la situación económica del país será peor dentro de un año. Tres de cada cuatro opinan que todo seguirá igual y un 14,1% sostiene que las cosas mejorarán.
El cuarto problema más mencionado es la categoría «los políticos en general, los partidos y la política». Lo señala el 29,7%, sin apenas variación respecto a abril. En quinta posición está la Sanidad (10%) y en sexta la Educación (6,3%), donde sí se observa un cierto repunte. El «top ten» lo completan los recortes (4,8), los bancos (4,5) y los desahucios (4,1). También aparecen mencionados, aunque en menor medida, el Gobierno y políticos concretos, las pensiones, la vivienda, la inmigración o la subida del IVA.
El trabajo de campo se realizó entre el 1 y el 10 de mayo. Al pesimismo sobre la economía se le suman las dudas sobre la situación política. Casi la mitad cree que es peor que hace un año y un 41,7% afirma que dentro de un año será igual. Solo un 9,8% piensa que irá a mejor.
Preguntados por el modelo de organización territorial, un 31,5% mantendría un Estado con comunidades autónomas como el actual, un 22,9% aboga por un único Gobierno sin autonomías y otro 14% restaría competencias a las comunidades. El 11,4% daría mayor autonomía a las regiones y un 8,3% se muestra favorable a reconocer la posibilidad de convertirse en estados independientes.

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