El juez vuelve a mandar a Miguel Blesa a la cárcel y esta vez sin fianza.
El expresidente de Caja Madrid ha acudido a declarar otra vez por la compra del National.
La medida había sido solicitada por la acusación particular y sin el visto bueno de la Fiscalía.
La clave son los correos hallados en el ordenador del banquero.
El titular del Juzgado de Instrucción número 9 de Madrid, Elpidio José Silva, ha ordenado este miércoles prisión sin fianza para el expresidente de Caja Madrid Miguel Blesa por las supuestas irregularidades en la compra del City National Bank de Florida. Blesa, que ya pasó por la cárcel por este mismo caso hace tres semanas, está siendo investigado por supuestos delitos societarios, administración desleal, falsedad en documento y posible apropiación indebida. De todos ellos, el del delito societario sería en el que más interés está poniendo el juez. Según el código penal, la pena puede llegar a los siete años de prisión con los agravantes que se pueden añadir a este delito.
El juez, que está recusado por la defensa, comunicó in voce al acusado los cargos por los que lo envía a prisión. La prisión incondicional había sido solicitada por el sindicato Manos Limpias, que ejerce la acusación particular. La Fiscalía, sin embargo, se ha opuesto al regreso del banquero a la cárcel con gran vehemencia y ha esgrimido el gran arraigo social de Blesa.
Fuentes judiciales creen que la prisión incondicional es para evitar que Blesa y otros supuestos implicados establezcan una única versión de los hechos, lo que dificulte la investigación. Por tanto, el objetivo de la decisión del magistrado sería no tanto evitar la fuga del expresidente de Caja Madrid, al que ya le retiró el pasaporte, sino buscar un aislamiento del sospechoso.
Los abogados de Blesa, según adelantan fuentes judiciales, pedirán ahora la revocación del auto del ingreso en prisión ante la Audiencia Provincial de Madrid, un trámite que podría durar entre dos y tres semanas. Las mismas fuentes consideran que es muy probable que este órgano revoque la decisión del magistrado.
El juez ya ordenó el ingreso de Blesa en la prisión de Soto del Real el 16 de mayo. El banquero salió de la cárcel en menos de 24 horas tras depositar la fianza de 2,5 millones de euros impuesta por el magistrado, ya que la acusación no solicitó entonces la prisión incondicional y reclamó una fianza. Ahora, este extremo ha cambiado tras la decisión de Manos Limpias de solicitar prisión incondicional. El argumento que da la acusación es la "capacidad de maniobra" que demostró el expresidente de Caja Madrid al abonar tan rápidamente —menos de 17 horas— el dinero de la primera fianza.
A su llegada a la sede judicial a las 11.30, el banquero había comentado a los numerosos periodistas que le esperaban en la madrileña Plaza de Castilla que desconocía el motivo de la citación. El banquero ha estado tres horas declarando ante el juez. Antes de Blesa ha comparecido el exdirector financiero de la caja, Ildefonso Sánchez Barcoj, y también en condición de imputado por la misma causa. En su caso, sin embargo, el juez no ha adoptado ninguna medida cautelar aunque Manos Limpias también había pedido prisión incondicional para él.
Libertad para el exdirector financiero
En su intervención, de dos horas y media, el exdirector financiero ha sido preguntado sobre varios correos electrónicos que este se cruzó con Blesa antes de la adquisición del banco de Miami. En ellos se decían frases del directivo al superior como "ya hemos hecho lo que tú querías". El juez ha preguntado tanto a Blesa como a Sánchez Barcoj a qué se referían con estas frases y, según Elpidio José, esto no ha quedado suficientemente aclarado. Sánchez Barcoj ha asegurado estar en paro y buscando trabajo. Estos correos se encontraron en los archivos de los ordenadores que Blesa guardaba en su domicilio y que entregó al juzgado. Al margen de esto, hay un equipo de la Guardia Civil que sigue investigando estas comunicaciones.
El juez también ha interrogado a los imputados insistentemente sobre la compra de un millón de dólares cuando, supuestamente, la cotización de la moneda estadounidense estaba baja con respecto al euro y le podría favorecer a Blesa. El tercer tema de discusión ha sido que, supuestamente, se ha saltado los controles de la Comunidad Autónoma de Madrid y que por eso realizó la adquisición del National en dos partes.
En la providencia de citación notificada a las partes, Silva llamaba a declarar a Sánchez Barcoj y a su superior "visto el estado que mantienen las actuaciones" para que sean oídos "en calidad de imputados previa instrucción de sus derechos y debiendo comparecer asistidos de letrado".
El juez Silva investiga la compra del City National Bank de Florida en abril de 2010 —vendido hace unos días con plusvalías por 180 millones—. Además, en una pieza separada, también investiga el crédito millonario por valor de 26,6 millones de euros que la caja de ahorros otorgó a Díaz Ferrán, entonces propietario de Marsans, cuando era consejero en 2008.
Incidente de recusación
La defensa de Blesa interpuso hace unos días un incidente de recusación contra el juez Silva al dudar de su imparcialidad. En su escrito, denunciaron que las decisiones del magistrado revelan un "interés personal, directo e indirecto" en la causa, así como una "enemistad manifiesta" que lleva a pensar que actúa más como "denunciante" que como un instructor independiente. El abogado de Díaz Ferrán se sumó a este escrito de recusación porque consideraba que el juez no está siendo ni pareciendo imparcial.
El pasado 31 de mayo, el juez, que afronta su eventual expulsión de la carrera por un expediente abierto por asuntos ajenos a este caso, dejó temporalmente la investigación del crédito a la espera de que la Audiencia Provincial de Madrid resuelva sobre su recusación. Por la pieza del Banco de Florida también está recusado, si bien esta petición aún no se ha tramitado, lo que le ha permitido tomar la decisión de volver a enviar a Blesa a la cárcel y, esta vez, sin fianza para que no salga en unas horas.
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