Ocaso en Castrotierra-León(foto J.A.Miyares)
Standard & Poor's baja la nota de nueve comunidades autónomas.
• Prevé una recaudación 'mediocre' durante los próximos tres años
• Baleares y Cataluña rozan el 'bono basura' de Valencia
• País Vasco y Navarra, más fuertes que España por sus autonomías
Tras situar la nota del Reino de España a dos escalones del 'bono basura', la agencia de calificación Standard & Poor's ha rebajado la calificación a nueve comunidades autónomas españolas.
La firma bajó la nota de España de 'A' a 'BBB+'. Ahora ha recortado en dos escalones las calificaciones de Madrid ('BBB+'), Galicia ('BBB+'), Canarias ('BBB+'), País Vasco ('A') y Navarra ('A'); en tres escalones las de Andalucía ('BBB'), Aragón ('BBB') y Baleares ('BBB-'), y en cuatro escalones la de Cataluña ('BBB-').
Tanto Baleares como Cataluña se quedan al borde del 'bono basura', nivel de riesgo de inversión en el que ya se encuentra la Comunidad Valenciana ('BB'). Por su parte, País Vasco y Navarra mantienen una calificación equivalente al notable.
Poco margen de apoyo para el Estado
La firma considera que la capacidad del Gobierno de prestar apoyo a las regiones en el largo plazo se ha "debilitado", en un contexto en el que espera una suave recesión en 2012 de la economía española y una "lenta actividad económica" hasta 2015.
Algunas comunidades autónomas podrían desviarse de los objetivos presupuestarios, lo que se traduciría en una mayor acumulación de deuda por el descontrol de los gastos y el empeoramiento de la recaudación de impuestos.
Standard & Poor's cree que la capacidad de recaudación de las regiones, afectadas desde la recesión de 2009, puede seguir disminuyendo en 2012. Además, tendrá un "crecimiento mediocre" en los próximos tres años.
En el caso de País Vasco y Navarra, la agencia destaca que tienen perfiles crediticios "fuertes" a pesar de la "sustancial concentración de sus actividad económica en España". Las claves de su éxito son, según la agencia, su autonomía fiscal, su sólida gestión financiera, su moderadamente baja carga de deuda y sus economías altamente orientadas a las exportaciones.
Por otra parte, la agencia también ha recortado en dos escalones la calificación de Vizcaya, desde 'AA-' a 'A', así como los de la provincia de Barcelona y las ciudades de Madrid y Barcelona, desde 'A' a 'BBB+'. La perspectiva de todas estas notas también es 'negativa'
Escándalo
La mitad de lo que usted gana, amigo lector, se lo queda el Estado: esto va a estallar sí o sí.
Tal día como ayer se celebraba la festividad de Santa Antonina de Nicea -de Bitinia para ser más exactos-, mártir cruelmente torturada y atormentada con distintos suplicios, a la que colgaron durante tres días, encarcelaron a lo largo de dos años y, por último, bajo el gobernador Prisciliano, y por la confesión de su fe en Dios, quemaron viva allá por el siglo IV de nuestra era.
No creo casual que ayer fuese, asimismo, el «Día de la liberación fiscal», ya que desde el 1 de enero hasta el 4 de mayo todos los frutos de su trabajo, amigo lector, han ido a parar al Estado, que, encima, en el colmo de la burla, se autodenomina como Estado del bienestar. Peor aún, si se considera lo que aportan las empresas por sus trabajadores a la Seguridad Social -que obviamente restan de los salarios- el día de marras se desplazaría hasta el 30 de junio, así que ese Estado benefactor y providencia, por el que derraman lágrimas sin cesar todos los progres del mundo, nos quita -por no decir que nos roba- la mitad de lo que tenemos. Y así año tras año, y a la hora de dejar una herencia aún más todavía.
Nos quita y nos devuelve, alegarán los paniaguados del Estado del bienestar. Cierto, pero ¿alguien se ha molestado en calcular el saldo?
Considerando los coches oficiales, los empleos de la casta política y sus amigotes, los aeropuertos sin viajeros que enriquecen a las constructoras -que, claro, pagan suculentas mordidas a los políticos-, los sobrecostes de los Museles, Muselinos y Muselazos que recorren la geografía nacional o los HUCA de todas las escalas, no creo equivocarme si afirmo que de cada tres que nos quitan nos devuelven apenas uno y con malos modos y mil zancadillas, como dictar sentencias cuatro meses después de los juicios, hacer radiografías con demoras de seis meses o inaugurar un AVE 50 años después de lo prometido.
Ni en la más oscura Edad Media los siervos eran expoliados como ahora nos explotan y atracan. Esto va a estallar sí o sí.
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