La bandera estelada.
Los derechos de uso de la enseña.
Este país es singular, diferente, y no acabo de entender por qué los hay empeñados en separarse de algo tan original. La estelada, la bandera que ondean los independentistas catalanes, está registrada por un tipo que resulta ser contrario a la independencia de Cataluña y que ostenta los derechos de uso de la enseña. Toma castaña. Otra españolada. Una de esas situaciones que sólo se pueden dar en nuestro país, y que tan bien han sido retratadas en la literatura y el cine cómico nacional.
Podría perfectamente ser el argumento de una de Ozores. Imaginen la procesión de mases, pujoles y tardases llamando a la puerta de ese individuo para rogar que les permita continuar usando la bandera, que mire usted, que ya tenemos toda la publicidad hecha, que no es sólo una cuestión de independencia, que es de economía y tener que dar marcha atrás para diseñar otra bandera nos saldría por un ojo de la cara.
¿Y qué hace un antiindependentista con semejante arma en la mano o, mejor dicho, en el registro de marcas y patentes? Es que la situación puede ser rocambolesca. Porque como le dé por decir que a euro el ondeado de bandera, apañados van. Más les valdría agitar servilletas de papel. Y cuidadito que no estén registradas. Porque, vamos, ya que se pone uno en plan súper separatista, haciendo acopio de toda la simbología diferenciadora que sea posible, en qué cabeza cabe que nadie se haya detenido a comprobar si la banderita era de uso libre o pay per view. Es que nos emocionamos con esto de la independencia y pasamos por alto detalles fundamentales.
Que como sea verdad la mitad de las predicciones de los agoreros nacionales e internacionales, la Cataluña libre se quedaría fuera de la Unión Europea, del Euro, de la Organización de Naciones Unidas, de la OTAN, del Pacto de Varsovia, hasta de Eurovisión, en la ruina, marginada por los mercados financieros, como un apestado dentro del Primer Mundo. Y, encima, teniendo que pagar royalties a un enemigo de la causa por ondear la bandera. Qué despropósito más grande. A mí, el furor de ser independiente se me pasó cuando me di cuenta de lo farragoso y caro que es. Quita p'allá.
COMENTARIO:
ES DE CHISTE JAJAJA...........JUA
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